Se quitó las chanquetas
y las dejó en la orilla
y se lanzó dispuesta
a las aguas marinas.
Aguas intranquilas
en su vaivén de olas
la cubrieron toda
mientras sonreía.
Su sonrisa de cielo
se perdió a lo lejos
y vistió de duelo
a todo el pueblo.
El pueblo llora
a la quinceañera
que en mala hora
se sumergiera.
Dicen que el mar
se tragó su cuerpo
en modo voraz
como un hambriento.
Otros dicen que ella
ahogarse quiso
porque una gran pena
la llevó al suicidio.
A escasos días de su fiesta
sucedió la tragedia
y el evento de etiqueta
se echó por tierra.
En la solitaria playa
al susurro del mar
las olas bailaban
su fiesta de Vals.
Su danza quinceañera
se celebró entre algas,
con canoas pesqueras
y collares de lágrimas.
Su música la trajo el viento
con quejidos lastimeros
y como las hadas de cuentos
desapareció a lo lejos.
Adiós cumpleañera
adiós, adiós
tu recuerdo nos queda
envuelto en dolor.
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Autor: Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibo, Venezuela
-
Autor:
Diaz Valero Alejandro José (
Offline) - Publicado: 18 de agosto de 2015 a las 09:26
- Categoría: Triste
- Lecturas: 75
- Usuarios favoritos de este poema: Trovador de Sueños ...y realidades., Pepe Pnca.
Offline)
Comentarios3
versos tristes, pero de pluma hermosa! Me recuerdan una hermosa canción "Alfonsina y el mar" de Ariel Ramirez. ¿La conoces? Narra el triste fin de Alfonsina Storni, quién decidió un día entregar también su vida al mar, en la ciudad de Mar del Plata, Argentina.
Aquí va:
por la blanda arena que lame el mar
su pequeña huella no vuelve mas
un sendero sólo de pena
y silencio llegó
hasta el agua profunda
un sendero sólo de penas muda llegó
hasta la orilla (espuma?)
sabe dios que angustia te acompañó
que dolores viejos calló tu voz
para recostarte arrullada en el canto de las
caracolas marinas
la canción que canta en el fondo
oscuro del mar
la caracola
te vas Alfonsina con tu soledad
que poemas nuevos fuiste a buscar
una voz antigua de viento y de sal
te requiebra el alma
y la está llamando
y te vas
hacia allá como en sueños
dormida Alfonsina vestida de mar
cinco sirenitas te llevarán
por caminos de algas y de coral
y fosforescentes caballos marinos
harán una ronda a tu lado
y los habitantes del agua van a jugar
pronto a tu lado
bájame la lámpara un poco más
déjame que duerma nodriza en paz
y si llama él no le digas que estoy
dile que
Alfonsina no vuelve
y si llama él
no le digas nunca que estoy
di que me he ido…
te vas Alfonsina…
Gracias hermano. Claro que conozco ese tema, es ya un clásico de la canci´ñon latinoamericana, al igual que "gracias a la vida" y "alma llanera". Esta fue también una historia real ocurrida hace cuarenta años que a penas ahora me dió por reseñar poéticamente. Un abrazo.
muy interesante, esos hechos conmueven. La verdad es que aunque no apruebo el suicidio, admito que es quizás la manera mas poética de hacerlo. Menos dolorosa que una mancha de sangre. Menos violenta que un salto al vacío. Pero muerte al fin...
Sentido y profundo en toda su dimensión; tu pluma se desborda, hermano.
Un fuerte abrazo.
Saludos mi compa. Tristeza y poesía hicieron hoy una dupla en mi musa. Feliz dia!!!
Sublime y triste , pero sabes poner una luz al final de tu poema.
Un abrazo mi querido amigo Shira
Sí amiga, fue una historia real hace cerca de 40 años y apenas ahora la convertí en poema para recordarla por siempre a pesar de su tristeza deja profundas reflexiones. Un abrazo!
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