QUIMERA

Bertini

Una noche, sublime y estrellada,

un lucero me mira vacilante;

y parece decirme en su mirada:

soy el alma de aquella vida errante

que te amò con pasiòn idolatrada

 

Yo tambièn, como tù, sufro el flagelo

de esta ausencia mordaz, que me devora;

de mis noches de amargo desconsuelo;

de mis dìas sin luz y sin aurora.

 

yo quisiera, lo mismo que un lucero,

seguirte en los espacios siderales

alejado del mundo traicionero

y el sòrdido vivir de los mortales.

 

Tu recuerdo es la imagen que ilumina

el oscuro sendero de mi vida;

y como alma perdida en la neblina

voy llorando el dolor de tu partida.

 

Esta noche contemplo el infinito

y ruego a Dios que, un venturoso dìa,

me lleve por el mismo caminito

allà donde tù estàs, amada mìa.

 

Pero sabrè esperar, con estoicismo,

el momento final de mi partida;

que la muerte me saque del abismo

fatal y doloroso de la vida.

 

 

 

 

 

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  • Autor: Bertini (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 24 de julio de 2015 a las 18:02
  • Comentario del autor sobre el poema: Es un recuerdo que taladra mi corazón todos los días,y mi ùnico consuelo es divagar en el alma de la poesía.
  • Categoría: Espiritual
  • Lecturas: 59
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Comentarios1

  • liborio cantillo

    Versos muy sentidos al amor ausente que dejan melancolía en sus letras
    Saludos amigables



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