TOMA TODO DE MÍ (Adiós a los miedos)

"Los miedos... ¡Cuántos interrogantes plantean esas dos palabras!
El día que decidas enfrentar lo que desconoces, ese día esos miedos se habrán esfumado.
Es así.
Todo está solamente en nuestra mente.
Entonces, cuando se asume la normalidad de un proceso vital, con su natural conclusión (hablo de la Muerte), nos llega la tranquilidad que todo continúa infinitamente -con la simple transformación de los elementos y la de sus energías contenidas- en otros sucesivos procesos posteriores.
La moraleja de la cuestión es que uno debe aprovechar cada instante en disfrutar el pasaje del que hemos tenido en suerte obtener, puesto que el momento en que nos tocará partir no ocurrirá "ni un segundo antes ni un segundo después de la hora señalada". Cada uno determinará cuánto ha de disfrutar o no de su vida, a pesar de todos los que nos pretenden arruinar este viaje.
Incluyendo sus miedos."

Eduardo Faucheux

 

TOMA TODO DE MÍ (Adiós a los miedos)

 

El pasado nunca será pasado, pues en algún inesperado futuro,

el pasado, inquieto, se retornará al presente

con algún lejano recuerdo, impertinente,

que nos dañará, posiblemente, muy duro.

***

Y se nos podrán ir todos los que nos aman...

Podrán todos abandonarnos a nuestra suerte...

Y no interesarles los que compañía piden o ayuda claman...

o que sigamos vivos o estemos enfermos o que se nos arrime la muerte.

***

 Pero, aun así, toma todo de mí, de toda mi disponible energía,

que la ofrezco para enseñar a quitar tus miedos, a dar una mano amiga,

para compartir una buena amistad o, tras un café, para explicar mi filosofía

o intentar que crezcan juntas nuestras sabidurías o a conseguir el fin que persigas.

***

Entonces, toma todo de mí; para dar o para conseguir de lo que esté a mi alcance.

No me pidas las cosas o habilidades que no tengo, ni lo que no puedo entregar,

porque lo que llevo en mi modesto equipaje o lo que dispongo en mi balance,

estoy dispuesto contigo a compartir, en este duro sendero del transitar.

***

Por eso, olvida tus miedos. Ellos solo son, de nuestras inseguridades, un fiel reflejo;

las penosas imágenes de nuestros "no puedo" que nos ofrecen nuestros espejos,

que nos observan, que nos estudian, que nos miran desde cerca o desde lejos,

escudriñando y encadenando nuestras almas, para crearnos mil complejos.

***

¡Atrévete a realizar todo lo que ayer soñaste!

¡Atropella a todo aquello que ayer deseaste!

¡Abraza fuerte todo eso que hoy ambicionas!

¡No dejes que escape lo que te enamora o apasiona!

 

Eduardo Faucheux
20-08-2015