Te veo, mientras la música invade la mente
las notas se elevan, en infinitas escalas
es el violín y tus ojos tan bellos
mirando el paisaje distante.
El piano, desciende hasta las notas más bajas
tus cabellos, se desbordan ocultando las lágrimas
cuando irrumpe la orquesta en furiosa sinfonía
mi corazón palpita mientras mi mano busca la tuya.
los instrumentos, en frenético contrapunto
opacan la orquesta con monótonos acordes.
Apago la música y te pregunto si aún me amas.
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Autor:
Esteban Couceyro (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 22 de junio de 2015 a las 11:24
- Categoría: Amor
- Lecturas: 63
- Usuario favorito de este poema: Gilberto Angel Rodriguez sanchez.
Offline)
Comentarios2
Muy bueno el poema un gusto leerlo
Gracias por tus palabras generosas.
Un abrazo
Esteban
no hay mejor música que la de un corazón palpitante de amor
Es cierto, pero aveces la "música", la escuchamos con audífonos... y nos damos cuenta tardíamente.
Un saludo
Esteban
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