Tarde invernal

Se marcho antes del atardecer;
Dejo todo inconcluso,
Un corazón roto,
Unos sueños no consumados 
La angustia, la furia y el rencor 
Una maraña de "malas costumbres"
Y lo peor, el amor de su vida,
Descendió a un infierno que pensó era un paraíso,
Mas sin embargo tuvo una felicidad temporal,
"El que a hierro mata a hierro muere"
Mientras el gozaba, reía y hacia el amor,
Ella convertía lo poco que le quedaba en esperanzas, jamás perdió la fe y borro de su vida todo aquel mal sentimiento que pudiera presentarse,
El ahora se da cuenta todo aquello que un dia tuvo y despreció,
Intenta buscarla en sueños, en avenidas, en lugares comunes,
No la encuentra por supuesto,
Porque ya no pertenece a este mundo y por supuesto el no lo sabe.
Antes de cerrar sus ojos lo perdono, Y hoy después de varios años es un ánima que ronda en la habitación de el, como un día le dijo ella "Te llevo pegado a mis pestañas" "Sin ti soy una viruta al viento", tantas y tantas cosas de amor, lo tiene atrapado infinitamente reclamando todo aquello que le perteneció, un aroma sorprendente a duraznos comienza a percibir,  es la presencia de ella que no lo deja, porque su amor trascendió mas allá de la muerte.