Se detuvo el tiempo en silencio.
Se detuvo a mirar hacia atrás.
Se detuvo en el presente añorando el futuro
que nunca llegará.
Se regresó al pasado, a los miedos,
a las noches de imsonio queriendo recuperar
lo que nunca regresará.
Se congelaron facilmente las manillas del reloj
a las 12:20a.m, destruyendo por completo
los sueños, las ilusiones, y las risas
de tantas promesas hechas en la oscuridad.
Titureando las ilusiones ya bisecas
que cayerón de un verano al rojo-amarillo otoñal.
Deshaciendose de los nuevos inventos,
condenando a la caída de estos huesos
que levantarse jamás podrán.
Porque llegará viviente el fantasma de la soledad,
de las cosas que duelen y matan sin tener piedad,
denunciando un eterno invierno el que como fuego
en grado Fahrenheit ardera.
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Autor:
darkira (
Offline) - Publicado: 29 de mayo de 2015 a las 04:43
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 45
- Usuarios favoritos de este poema: Pepe Pnca, Aquiles Mirmidon.
Offline)
Comentarios3
Un gusto leerte
bambam
Muchas gracias!
Buenísimos versos poeta, me encantaron.
Un abrazo
Muchas gracias 😉
El consuelo que necesita todo ser humano es sentirse bien consigo mismo para calmar todas las tempestades y las tormentas que llegan a diario. Un placer leer tu genial poema un tanto lúgubre sombrío, gótico pero a la vez muy bello.
Saludos y felicidades.
Hay tempestades que aunque uno esté bien consigo mismo, suelen tumbar a uno facilmente. Muchisimas gracias por tan lindo comentario.
Entonces hay que abandonar la soledad y ser feliz con las cosas que el mundo prodiga.
Saludos y mucho animo,
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