FATALIDAD

Andrés

Si era fatal decírtelo,
jamás
lo hubiera hecho.
Lo que queda, ecos,
nocturnos, muertos en su lecho:
agonizantes, olvidados.
Nada como vivir sin noche,
y ahora, aquí frente a mí
tantos afanes muertos.
¡Tan bien que se veía!
pero tan fatal
que ni el sol mismo sabe
cómo muere cada día;
mas entre la realidad
más honda,
y la verdad tan áspera,
si he de morir por algo
que sea

-rosa de filo-

por haber dicho

que "Te amo".

 

ANDRES SARELLANO MTZ

DERECHOS RESERVADOS

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.