Me dejaste ir
sin sollozos…
Tu beso fue
el mejor silente despido.
La puerta quedó abierta,
entrarán nuevos aires
y saldrán tropezándose
mis penas.
A veces uno vive con dolores,
éstos hieren
al alma…
La noche y sus suspiros
y una voz…
¡Quiebra el silencio
y la plácida calma!
¿Quién puede
iluminar esperanzas?
regálame cometas y constelaciones
ahí me dormiré
cuando cante la noche
junto al viento, mirándolas.
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Autor:
juan f bravo lira (
Offline) - Publicado: 23 de abril de 2015 a las 10:05
- Categoría: Amor
- Lecturas: 60

Offline)
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