Ismael se sentía nervioso y muy agitado.
Esa noche se embarcaba. Había dado todos sus ahorros al que llamaban “el gato”. Hombre sombrío, misterioso, que organizaba este tipo de viajes. Aseguraba que podían llegar, sin problemas, a las costas de Italia.
La situación económica precaria. Su esposa Sofía, al terso mes de embarazo. Sin trabajo. Todo esto lo habían empujado a buscar otros horizontes. Los que habían logrado llegar y establecerse podían mantener a la familia. Iría, ahorraría lo más que pudiera y una vez establecido vendría por su esposa y su hijo. No quería abandonar su país, su patria, pero “la necesidad tiene cara de perro rabioso”. Mientras estaba él solo era otro discurso, ahora con familia, la situación empeoraba. La guerra en su país, el hambre, la violencia no le dejaban otra opción.
- No llores mi amor – le decía a Sofía con voz dulce, lo más tranquilo que podía –
- Tengo miedo mi amor. Estoy aterrorizada. La idea de no verte más me mata. No quiero que te vayas Ismael. Tiraremos adelante. Verás que podremos – las lágrimas recorrían el rostro y fresco de la joven –
- Ya lo hemos hablado Sofía. No tenemos casi para comer nosotros. Ahora con un hijo en arribo la cosa será más difícil. Te quedarás donde tu madre y pronto volveré. Lo sabes que si fuera por mí no me iría, pero la citación….. – se le quebró la voz y no pudo continuar. La abrazó fuertemente, la besó y después de separarse de ella, con su mochila a cuestas, se dirigió al puerto -.
- Bueno, bueno, todos a la barca, dentro poco parten – se escuchó la voz ronca y misteriosa del llamado Gato – hombre de media estatura, regordete, con un rostro oscuro, barba larga y descuidada. Otros dos lo acompañaban siempre a donde iba. Misteriosos y sucios como él. Antes de partir le habían dado el dinero. Les habían prometido que al llegar alguien los esperaría, les arreglarían los papeles. Que no se preocuparan que todo estaba organizado. En total eran unas setenta personas, entre ellos mujeres, niños, ancianos….
- ¿En esta barca nos vamos a ir? - Preguntó asombrado Ismael –
- Pues si no te da la gana, puedes irte en primera clase, en el próximo ferry de las once, ja ja ja – le respondió el Gato mientras reía irónicamente, haciendo ver sus oscuros dientes – ¡Vamos coño, arrea que se hace tarde!.
Miró hacia el pueblo, le pareció ver a Sofía, a lo lejos, que se despedía. Tuvo ganas de quedarse, de salir corriendo y tomarla en brazos. De repente recordó toda su precaria situación, el embarazo de Sofía, la violencia, la guerra. Regresaré – se dijo a si mismo – Con un fuerte suspiro entró en la frágil embarcación en donde podían ir veinte personas y eran más de setenta.
El día se despedía lentamente dejando paso a la noche. Todos guardaban silencio. Los estaban remolcando hasta cierto punto y después ellos mismos tenían que seguir. Hombres de mar como eran sabían navegar. Conocían la ruta. Les habían facilitado aquella frágil embarcación, un motor pequeño, gasolina.
- Dios te pido, acompáñanos. Cuida a Sofía. Haznos llegar sanos y salvos a nuestro destino – entrecerró sus ojos y se encomendó. Quien rezaba a Al-lah, quien a Cristo, quien a su dios….un murmurío acompañaba el calar de las tinieblas.
Seguían navegando. Dos días ya han pasado. No tienen alimento y quien lo tiene lo guarda celosamente. El agua dulce comienza a faltar. Se niegan a compartirla. Poco a poco comienza el temor y la desconfianza a tomar partido entre todos.
El viento comienza a hacerse presente cada vez con más fuerza. A lo lejos el cielo se vuelve gris. A pesar de todo, no pierden la esperanza. Pronto verán las costas de Italia y llegarían al destino.
Ismael ha visto detrás de ellos, en la estela que deja la barca, asomarse tres o cuatro aletas dorsales. Le recorre un escalofrío por la espalda acompañado con el erizar de su piel. No quiere ni pensar que podrá suceder si la barca afonda. ¡Dios ayúdanos! – suplicó internamente – A su lado una mujer embarazada. Le hizo recordar a su Sophia. El agua se le había acabado. Sostenía en su regazo a su marido, el cual se sentía mal, tenía fiebre. Le extendió su mano y le dio el agua que tenía para si. La mujer lo miró con sus ojos oscuros y pronunció algo que el interpretó como un “gracias”, acto seguido le dio agua a su marido. Prefirió no beberla sino reservarla para él.
Comienza la lluvia. El cielo se oscurece. El viento cada vez más fuerte y la barca se mueve sin parar. Gritos de súplica. Algunos invocan Al-lah, otros a Cristo. Cada vez más fuerte se hace la tormenta. Todo gris. No se ve el horizonte.
Tenemos que aligerar la carga – se escucha una voz – Tiren los equipajes.
Sin pronunciar palabra alguna todos tiran sus equipajes al agua. La situación empeora. Crece el pánico. Siguen las invocaciones. Comienzan a perder la cabeza y surge el instinto de sobrevivencia. Comienza la pelea al interno. Alguno eleva la voz y dice: “aquí solo se ora a Al-lah no queremos cristianos aquí adentro. Deshagámoslo de los malditos cristianos”. Sí sí, ¡fuera! – responden algunos – A cierto punto todo es confusión. El grupo numeroso comienza lanzar gente por la borda. Sobre todo a los proclamados cristianos.
Ismael solo sintió que lo elevaban y sin poder decir palabra alguna ya estaba en medio del mar.
Nadó todo lo que pudo, hasta que sus fuerzas le abandonaron. En un segundo pasó toda su vida delante. Vio a Sofía, su Sofía que se despedía a lo lejos en el puerto.
Le pareció escuchar gritos a lo lejos, reconoció la voz de la señora embarazada que estaba a su lado, la angustia de la muerte lo sobresaltó.
Dios, Dios, cuida a Sofía te lo pido – logró decir en voz alta - hasta que una ola enorme lo cubrió para siempre.
“Noticia de última hora, naufragio al frente de las costas de Palermo, en aguas internacionales, no se sabe el número exacto de muertos. Los emigrantes estaban en plena mar cuando comienzan a pelear entre ellos. La pelea por motivos religiosos, cuentan los sobrevivientes. Han tirado en el mar más de quince personas por ser cristianos.
- ¡Bien hecho!. Estos malditos extracomunitarios que vienen aquí a robarnos el trabajo, trayendo enfermedades. Todos unos ladrones, puercos, hediondos. Eso les debería pasar a todos, a todos…
- ¡Silencio Roberto! ¡por favor! No digas esas cosas. Eso es malo. ¿Qué sabes tú de los motivos de esa gente para dejar su patria? Recuerda que tu abuelo tuvo que emigrar en Argentina cuando aquí la situación estaba mal. Se fue para mejorar y mantener a tu madre y hermanos y…..
- ¡Calla mujer!, eso no tiene nada que ver. Mi abuelo no era un delincuente. ¿Qué vas a saber tú? ¡Calla! ¡calla!
En un puerto lejano, perdido, en Mali, una mujer otea el horizonte. Su mirada se pierde en medio del mar inmenso. Ese mar en el que un día vio partir al amor de su vida y que nada sabe de él. Una lágrima corre su mejilla mientras lo recuerda. Dios mío – ora en silencio - cuídalo donde quiera que esté y hazlo regresar pronto.
- Mami, mami, mira lo que encontré . La voz de su hijo la trae a la realidad. Una hermosa y sana creatura, con un par de ojos oscuros y profundos. Cada vez más parecido a su amado Ismael.
- Ven mi niño, vamos a casa. La abuela nos estará esperando. – Le dice con voz sonora -. Le extiende la mano y a paso ligero regresan al pueblo.
(Derecho de autor SAFE CREATIVE safecreative.org)
Lee todo en: Poema Muerte detrás de un sueño , de Kavanaruden, en Poemas del Alma http://www.poemas-del-alma.com/blog/mostrar-poema-344690#ixzz3Y6SstTCr
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Autor:
hugo emilio ocanto (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 23 de abril de 2015 a las 02:45
- Comentario del autor sobre el poema: Comentario de su autor, Kavanarudén: El día 16 una noticia conmovió los medios de comunicación social. Encontrada en una barca de emigrantes. Se enteraron que en una discusión fueron tirados al mar quince personas. Una discusión que según los sobrevivientes, fue por motivos religiosos, entre musulmanes y cristianos. Las autoridades han comenzado a buscar los cuerpos y han logrado recuperar algunos, sin vida. Me impresionó el hecho. Una historia, una reflexión. Que tengan todos una buena semana amigos y amigas, lectores del alma. Kavi. http://www.abc.es/internacional/20150419/abci-supervivientes- naufragio-Italia-201504192217.html
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 48
- Usuarios favoritos de este poema: Trovador de Sueños ...y realidades., nellycastell, la negra rodriguez, Aquiles Mirmidon, lindaestrella, Isis M, Marc Tellez Gonzalez, Diluz, espejo detualma.
Offline)
Comentarios11
Esas religiones que en lugar de unir, provocan la muerte
Saludos amigos Hugo y kavi
bambam
Bambam
Gracias por pasar y dejar tu comentario.
Hugo ha dado voz e interpretación a esta dura historia. Como siempre su talento se nota y se reafirma, sobre todo porque lo pone a disposición de los otros. Gracias Hugo hermano querido y gracias a ti Bambam por tu visita y comentario.
Bendiciones
Kavi
Muchas gracias Bambam.
El relato de Kavi, es real y espantosamente cruel y triste.
Bendiciones a ambos.
Hugo Emilio
Hermano Hugo.
Gracias por este detalle, gracias por darle voz, interpretación a este relato-reflexiòn. Como siempre tus detalles son grandes y eso ennoblece tu alma.
Un abrazo hermano del alma.
Bendiciones
Kavi
Creo que es justo que los comentarios vayan dirigido hacia Hugo ya que es él quien ha interpretado mi escrito. Gracias de ya por vuestras visitas y de nuevo a ti Hugo por este detalle.
Kavi
Hermano Kavi:
Gracias a ti poeta por haberme cedido tu relato.
Para mí siempre es un placer hacerlo.
SIEMPRE AGRADECIDO A TI, poeta.
Hugo Emilio.
Bello homenaje a KAVI maestro HUGO ELMILIO, entrambos se unieron de lo mejor de la página, un abrazo.
Muchas gracias por acompañarnos en esta triste realidad, relatada por la genial pluma de Kavi, Herminson.
Un abrazo.
Hugo Emilio.
Pero quiero saber de Ismael?...muy bueno tu relato que aunque nos parezca algo normal ya en estos tiempos, porque el mar ha sido la cuna de muchos cubanos que han perecido en sus agua, este tuyo está escrito en forma única y muy ameno. Te felicito Kavi. Un fuerte abrazo mi niño. Para mi Huguito querido todo mi cariño y nunca le olvido en su voz nos suena un hecho en plena actividad. Besos a ambos.
Ahogado está Nelly, como cientos que mueren en las aguas por la misma espantosa situación.
En la pluma de este relato de Kavi es... impactante y tan real, que nos hace vivir las escenas...
Muchas gracias, Nelly, amiga querida.
Besos de ambos.
Hugo Emilio.
Es una historia que me impactó y a la vez me cautivó la forma de narrarla y hoy me cautiva nuevamente en tu voz HEO.
Es la historia de como la pobreza expectora a la gente de su patris y habiendo quienes se aprovechan del sueño de mejores días abusan y los llevan a la merte. en esta historia es degarrado saber que pro ser crisitianos fueron lso favoritos para ser lanzados al agua.
Es un gran trabajo de a dos.
besos.
Impactante realidad, Silvi.
Emigrantes que quieren llegar a destino, y hallan la muerte en las profundas aguas...
Muchas gracias en nombre de ambos, Silvi.
Besos.
Queridos amigos Hugo y Omar, por la tardecita me tomaré el respetuoso tiempo para leer y escuchar lo que nos comparten. Mis tiempos ahora me apuran, pero regresaré, Dios mediante, y por supuesto que el tema amerita infinito respeto.
Mi cariño
*Diluz
Querida Diluz:
Cuando dispongas de tiempo lee este gran relato de la pluma de Omar, en esta trágica realidad.
Cariños, amiga.
Hugo Emilio.
Tristemente esa situación es más común de lo que creemos...
Estupenda interpretación Hugo, felicidades a los dos!!!
Lamentablemente es así, más común de lo que creemos...
Muchas gracias Claudia en nombre de su autor y mío.
¡Fuerte abrazo!
Hugo Emilio.
Rectifico lindaestrella.
Discúlpame, me he confundido de poetisa.
Un fuerte abrazo, lindaestrella-
Hugo Emilio.
Hay 2 comentarios más
Y cada dia llegan más y mas noticias, es increible como estos sucesos nos llegan y llegan y nada los detiene.
Besitos Huguito y Molito mio, hermanos los dos
quedó perfecto!
Isis M
Y lamentablemente estos increíbles sucesos han de seguir existiendo...
Muchas gracias por acompañarnos, Isis.
Saludos en nombre de ambos.
Besos, hermanita.
Hugo Emilio.
A ustedes que lejos de pensar solo en si tambien hacen denuncia con estas publicaciones en pos del mejormaiento humano!
besitos Huguito mio!
Hay 1 comentario más
Que fuerte sentir, tragedia y dolor se vive en este relato.
Mueve el corazón hasta de los más fuertes.
Historia trágica hecha una bella obra de arte.
Dejó mi abrazo para ambos queridos amigos del alma Hugo, Kavi.
Marc.
Son las letras de la pluma de su autor, ante tanta cruel y triste realidad, Marc.
Muchas gracias poeta por acompañarnos y plasmar un comentario tan sentido.
Retribuyo abrazo en nombre de Kavi y mío.
Hugo Emilio.
Queridos Poetas, es esta una historia que cala hondo, dentro de un relato completamente estremecedor, en lo particular, la historia de Ismael y Sofía, y por otro lado, algo brutalmente escalofriante, especialmente sabiendo que ha sucedido en pleno siglo XXI, y hace apenas escasos días, y lo peor aún, que si no fuera por casos así como este, en que Kavi ha rescatado el suceso, de la triste noticia brindada por un noticiero, y habiéndola personalizado en este guion , no hubiera pasado de ser, uno más de los tantos hechos inconfesables, que suceden a diario, y aunque realmente duela decirlo, el mundo sigue andando. Seguramente, si en esa balsa hubiera prevalecido el Amor entre los unos y los otros, priorizando la vida como el sagrado don que se supone cada religión enseña, si hubiera prevalecido el sentimiento humanitario y solidario, obrando todos para lograr el bien común, tal vez se hubieran podido salvar todos, o al menos no habrían muerto siendo asesinados, sino que hubieran quedado al menos, a la buena de Dios, el Dios bueno que se supone es uno para todos y al que todos deberían honrar, porque creo que ninguna religión bien entendida enseña a asesinar, nadie tiene derecho a decidir sobre la vida o la muerte de nadie.
Felicitaciones a los dos, han logrado que me compenetrara con gran sensibilidad.
Y a ti decirte Hugo, que me has trasladado a mi niñez , recordando esos radioteatros que escuchaba mi mamá. Veré la forma de poderle llevar el audio.
Los abrazo con cariño, muchas gracias por tanto esfuerzo y dedicación, Gracias Poetas.
*Diluz
Una historia real, que destroza el alma.
La historia de Ismael y Sofía, tiene casos similares al de ellos.
Tienes razón, si Omar no hubiese editado esta realidad, sería un suceso más desapercibido por la sociedad.
Suceso, como tú dices, suceden a diario.
Cuando se tienen distintas ideologías religiosas, pasa esto.
Con amor solidario, esta balsa no hubiese tenido su trágico final y muchos de los murieron se hubiesen salvado.
El mundo se está comportando muy egoístamente, y lo percibo cada vez más cruel.
El único dios que tendría que venerarse, sin tener que llegar a horrendos crímenes; pasa aquí algo similar con lo que pasa en nuestro país. La palabra de algunos pocos están destruyendo nuestra patria. Personalmente no creo en nadie.
Muchas gracias por tus felicitaciones y habernos acompañado.
Me acuerdo cuando me comentaste algo similar referente a ese radioteatro que ya nunca más hemos de tener...
Tiempo pasado, que aún perdura en nuestro corazón.
Trata que tu madre lo escuche.
Le envío mis saludos, lo mismo para tu familia, amiga.
Para ti todo mi cariño, Alicia,
Un abrazo , amiga querida.
Seguro Omar te envía un abrazo.
Hasta cualquier momento, poetisa.
¡Ojo con la moto!. Maneja con cuidado.
Hugo Emilio.
La tragedia sigue, llos políticos discuten sus diferencias y la gente mueren en las aguas sin compasión. Muy emotiva y sumamente bien plasmada tu prosa Kavi, y junto con la voz de Hugo viene siendo una obra de alta calidad.
Un fuerte abrazo a ambos,
David
La tragedia de la vida, como en este caso, la hacen los malparidos.
Muchas gracias por acompañarnos, David.
Ambos agradecidos.
Un fuerte abrazo.
Hugo Emilio.
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