mi amiga,
cuando se enoja
cuando le enfada la falacia
enmascarandose de la verdad
..pareciendo la realidad
a ella.
descargo genios de trucos desde mi botella.
cuando la sombra de la tierra
la hace oscura
me siento acerca
y lentamente
le doy con la punta del dedo a ella.
Y así le enojo más
a ella
(si otros modos primarios no tiene efecto)
al punto que prepondera
la ira original,
entonces avanzo a la etapa final.
me acerco a ella
otra vez, y se aleja
se mueve atras
pero no me resigno
y le doy un beso
no a la boca, sino a la espalda.
En este momento
con mis ojos muy atento
le presento lo que había perdido
un clipe, un arete, o algo necio
hallado y preservado
por este momento.
Miro muy amorosamente
a ella,
y le digo, falto de aliento,
--!qué fea te ves!
y sonrío en tal modo que
me veo muy feo pero sencillo.
Ahora, por supuesto, sonríe
ella.
Para hacer sonreír chiquitas lagrimosas
hay trucos, y astucias,
y hay otros métodos,
si me des una sonrisa
ahora te diré todos.
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Autor:
namus (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 2 de marzo de 2015 a las 19:05
- Comentario del autor sobre el poema: básico, pero sincero.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 54
Offline)
Comentarios2
La sonrisa perfecta. Que gusto leer tu poesía.
Saludos poeta.
qué bien! 🙂 me gusta que te gustó, aunque es una obra más imperfecta y básica. gracias por leerme!
Es un placer.
uuummmm son juegos peligrosos 🙂 Saludos
hmm... qué es amor sin peligros? 😉 desde el tiempo de la noches de arabia...
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