Y aquella noche se quedó ladrando a la luna y lamiendo estrellas, mientras su alma canina escapaba de su cuerpo salpicado de arena.
Y la playa lo abrazó en plena orilla, queriendo sepultar su cuerpo pero las olas inquietas se negaban a hacerlo.
Y cuando los primeros rayos de sol iluminaron la playa, allí estaba todavía esperando su sepultura.
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Autor: Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibo Venezuela
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Autor:
Diaz Valero Alejandro José (
Offline) - Publicado: 14 de enero de 2015 a las 09:48
- Categoría: Cuento
- Lecturas: 22
- Usuarios favoritos de este poema: rosamaritza, El Hombre de la Rosa, Trovador de Sueños ...y realidades., Beatriz Blanca, DELICADA ABRIL.
Offline)
Comentarios5
Maravilloso. Una demostración de como el poder de combinar las palabras evocan sensaciones en el alma.
Un abrazo!
realmente triste, y reflexivo este cuento, de momento me invadió una pena por él, abrazos y besos mi querido Alejandro tqm.
rosamary
Muy emotivo tu cuento playero amigo Diaz Valero
Muy bellas tus letras de hoy..
Un placer pasar por tu portal...
Saludos de tu amigo Críspulo...
Manejas genialmente los tiempos de tus letras, hermano. Un honor leer.
Un fuerte abrazo.
Que tristeza enorme respira mi corazón, es un cuento que duele.
Un saludo de Bea.
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