Todos lo vimos morir
sin otorgarle importancia
restándole relevancia
a su glorioso existir,
como si ese sucumbir
no tuviese su valía
porque la cruel agonía
que entre sombras se silencia,
es de nuestra vida esencia:
La muerte de un nuevo día.
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Autor: Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibo, Venezuela
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Autor:
Diaz Valero Alejandro José (
Offline) - Publicado: 20 de noviembre de 2014 a las 09:06
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: Trovador de Sueños ...y realidades., DELICADA ABRIL, El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios3
Sobran las palabras para expresar lo que hoy dejas con tu sapiencia y tu grácil letra, a la vida que pasa todo. Siempre es un privilegio leerte, hermano.
Un fuerte abrazo.
Gracias mi compa!!!
Hermosas son tus bellas décimas amigo Diaz valero...
Un placer pasar por tu gratificante portal...
Abrazo de amistad y afecto de Críspulo...
El Hombre de la Rosa...
¡Cuánta verdad!, es para meditarlo mucho, estimado Alejandro.
Tu amiga Bea.
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