Despierto asustado entre sudores a las 4:05am, –hora que marca el reloj- y me percato que no hay electricidad, el silencio a mi alrededor es solemne. Tomo el teléfono y me dirijo a la sala intentando alumbrar mi camino con su escasa luz, a mi paso las sombras se desfiguran ante mis ojos, pareciera ser un grupo de personas escondiéndose bulliciosamente con cada paso que doy.
Eso eran esas sombras, lúgubres, taciturnas, horrendas a mi escasa visibilidad -comentaba el ciego para sí mismo, al imaginar su andar en una noche cualquiera-.
Fito Baptista
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Autor:
Adolfo (fito) Baptista (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 30 de octubre de 2014 a las 16:01
- Comentario del autor sobre el poema: Alguna vez por la madrugada todos nos convertimos en ese ciego.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 98
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios3
Muy hermosa tu prosa amigo Adolfo
Un placer pasar por tu portal...
Un abrazo de Críspulo....
El Hombre de la Rosa
Un relato interesante, un placer encontrarte.
Saludos
Isis zkt Kitty
que poder !!! bellas tus palabras !!! una manera muy especial de ver la vida !!! te envío mí luz y mis bendiciones!!!
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