Apagándose en el silencio
La voz perenne,
Opacándose en la fatuidad
De su propia existencia.
Cual saeta que rasga el cielo,
Así cruzaba en antaño
El universo de los pensamientos,
Más ahora reducida a reflejos fugaces,
Se ve encerrada en la oscuridad de su espíritu.
Terrible el destino que aguarda
A aquella voz entornada
Que alguna vez,
Cambio la voluntad de los hombres.
El astro lumínico revela
Las ideas marchitas
Del pensador frustrado.
La difuminada voz
Con nostalgia se lamenta,
A su destino se opone
Sin embargo, su fin no se pospone.
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Autor:
Ossian Serrano (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 29 de agosto de 2014 a las 15:11
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 64
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, Darkness.cl, ADOLFO CESAR MARCELLO.
Offline)
Comentarios2
Letras llenas del alma de la filosofia humana amigo Ossian Serrano
Grata la lectura de tus letras
Saludos desde Torrelavega
El Hombre de la Rosa
me falta mucho para llegar a entender mi propia realidad jejej pero gracias por el comentario, usted inspira mi respeto
Profundo, vibrante y bañado de belleza tu poema amigo...
Muy grato leerte...recibe mi abrazo.
Nancy
gracias es bueno sentir que las ideas se comparten...gracias
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