AQUÍ NO, AQUÍ NO, EN LA CASA (Cruzada por la vida)

la negra rodriguez

 

Era  un niño bonito,  un poco inquieto un poco rebelde como todo niño, sus padres: un ingeniero que  había tenido  años anteriores   como negocio familiar un burdel, su madre una campesina que había aprendido el oficio  de enfermería  sin título por lo que no podía ejercer y  quizás eso la llenaba de frustración que  desembocaba en el trato a sus hijos.  El niño al quien me refiero, estudiaba en una escuela del barrio, no era un alumno brillante  más  bien   corriente.

La escuela no contaba con todos los recursos para definirla como una  escuela excelente. La directora  era una mujer muy tirante déspota y de mal talante.

A mí me contrataron para enseñar danza folclórica y  cuando vi  la forma en que castigaban a los niños por el hecho de  que en los ensayos se equivocaban,  me arrepentí  de haber   aceptado ese trabajo.

El día del examen  oral que era  la última actividad  del año lectivo y  era la demostración de los conocimientos adquiridos  por los niños delante de sus padres, muchos de ellos se destacaban, otros por los nervios quizás  o porque en realidad no aprovecharon lo suficiente las enseñanzas, se equivocaban o no sabían que responder. Este niño  se equivocó en todo, por lo que su madre  optó por una actitud iracunda y lo lanzó a su hijo con todas sus fuerzas contra la pared, delante de los compañeros y de los demás padres. El sonido de su cabeza  en el cemento fue muy fuerte, por lo que el niño lloraba  más de humillación que de dolor. La directora en una actitud quizás peor, porque ella era la llamada para tranquilizar a la madre explicando que  a los niños los traicionan los nervios, lejos de hacerlo  gritaba: ¡AQUÍ NOOO...AQUI NOOO…EN LA CASA… EN LA CASA!!.   Si en la escuela lo masacró nunca quise saber  que fue lo que pasó en su casa.

Resultado:  aquel niño creció con  esa rebeldía mal encaminada y empezó a trabajar  en centros nocturnos como   bailararín del tubo, luego  le pareció más rentable dedicarse a la venta de  drogas. En el local del antiguo burdel de su padre y tíos.  Vende  todo tipo de drogas, la madre lo permite, su padre los abandonó y se fue   a los EEUU. Desde ese local distribuye para todo el sector,  y acuden a él  vendedores  ambulantes, estudiantes con la anuencia de su madre y  de la fuerza pública que sabe lo que pasa en esa esquina y cobran por su silencio.

 Quizás otra hubiera sido  su vida  si hubiera sido  criado  con  el respeto que se merecía por parte de  sus padres.  Esa rebeldía la hubiera encaminado   por vías  positivas Pero él recibió el maltrato de las agresiones físicas y verbales, el de la humillación frente al mundo y buscó quizás culpables  en la sociedad, o quizás se vengue de esa manera de una madre maltratadora, de una escuela  con las mismas características.

El dijo   “AQUÍ SI”  y vertió todo su dolor en  la venta de estupefacientes,  el maltrato recibido no solo lo dañó a él sino a toda la comunidad de jóvenes que  acuden a la esquna donde está ubicada su casa  su antro, su cárcel, su odio.

 

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios15

  • Raúl Daniel

    Qué magnífico el trato que has dado a esta faceta de la problemática infantil y adolescente!
    Es insospechable el rumbo que puede tomar la vida de un niño maltratado..
    Tú, aquí has hecho una pintura magistral de algo que está haciendo estragos en la sociedad: las drogas..
    Suele suceder que cuando los chicos caen en ese vicio, los padres se dan cuenta de ello cuando ya es tarde, y se preguntan: ¿Qué hice yo para merecer esto?.. Yo les quiero responder: ¡Todo, señores, hicieron todo!!!

  • El Hombre de la Rosa

    Ejemplarizante y hermosa tu generosamente bella prosa literaria estimada poetisa y amiga Carmen Silvana Rodriguez león
    Saludos de afecto y de amistad
    El Hombre de la Rosa

  • boris gold

    Cuando de niño son castigados y vejados vilmente, están inoculando en esos seres el más terrible de los venenos...¡el resentimiento!..
    Un abrazo

  • Cesar Zamora

    Has descrito de una manera exelente mi querida paisanita bella, una realidad impactante de nuestros dias, un gusto poder leerlo, un abrazo mi coronela

  • Maria Hodunok.

    Gracias a vos y a Raúl Daniel. Yo ya me uní, y este relato, absolutamente conmovedor, pero muy real en muchísimas ciudades, nos dejan una gran enseñanza.
    El cariño y la unión en los hogares, es fundamental, para la educación de los niños.
    Es un inmenso placer leerte Negrita.

    Cariñitos inmensos.

  • Aquiles Mirmidon

    Un genial relato , muy bien contado de una cruda realidad que nos afecta todos los días. Un abrazo poetisa.

  • John morales

    Sin duda es una cruzada a la cual me uno, que hermoso.
    Realmente me conmovió es un ejemplo el que nos da en su realto y gracias por ello.
    Saludos

  • Yolanda Barry

    conmovedor relato mi coronela,un gusto leerte siempre,que tengas una linda semana.

  • FENIZ

    una narrativa que invita a la reflexión, ha pensar como conducimos los hilos de nuestras vidas y que queremos de ella,, son realidades que existen en nuestro mundo, i ns quedamos quietos , quietos cerrando los ojos sin hacer nada por cambiarlas,,gracias por traernos esta reflexión en nuestras vidas ,,, saludo fraternal

  • Edmundo Rodriguez

    Querida Silvia ,
    Siempre la violencia ,
    maltratando y arruinando vidas .
    Mi càlido Abrazo .

  • claudia07

    la violencia trae mas violencia , muy bien llevado el tema felicitaciones amiga ñañis , besos

  • Hugo Emilio Ocanto

    Un gran aplauso por el tema que has plasmado, Silvi.
    ¡Adelante, cruzada por la vida, esto es sorprendente!.
    Gracias por tu sentir.
    Besos.

  • Enrique del Nilo

    La peor estupidez de un padre
    es evadir la responsabilidad
    de formar y corregir
    al hijo que le fue confiado
    bajo el pretexto
    de que no se le pueden
    vulnerar sus derechos...

    Mayor vulneración se ejecuta
    cuando se le priva
    de la pronta y tierna corrección
    condenándole al abandono
    desde la misma cuna

  • Lidia

    La frustraciión de algunos padres, que hacen a sus hijos pagar su rabia que llevan por dentro es imperdonable. Porque los hijos nunca son culpables de los fracasos de sus padres. Es lastimoso saber que eso sucede y peor si son los propios padres, porque eso hace que esos niños crezcan llenos de dolor y rabia y eso ayuda a que esta sociedad la delincuencia sea el único camino que esos niños transitan por la vida. Un fuerte abrazo.

  • ClaudiaAlheli

    Cuantos ejemplos como ese, cuanto maltrato, físico y verbal a los niños, y sobre todo, de quien se supone que los "defiende" ante cualquier circunstancia: su madre.
    Dios proteja a tantos niños desvalidos de amor, de cariño y de respeto.
    Magnífico tu escrito.
    Saludos amiga Silvi, un abrazo fraterno.
    Claudia Alhelí Castillo



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.