Un perro pateó un obelisco
y el obelisco se cayó,
el obelisco al caer al piso
en el mismo sitio hizo
un hoyo de gran proporción.
En ese hoyo el perro se metió
y una lombriz de tierra
entre sus patas traseras
enseguida se enredó.
Al enredarse sus patas
al perro se le hizo lata
y por eso gruñó
pero la lombriz de tierra
ni siquiera lo escuchó
porque estaba tan distraída
que no sentía ni los pellizcos
por pensar en la caída
y la forma sorpresiva
en que cayó el obelisco.
Autor: Alejandro J. Díaz Valero
Maracaibo, Venezuela.
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Autor:
Un Rincon Infantil (
Offline) - Publicado: 19 de agosto de 2014 a las 14:23
- Categoría: Infantil
- Lecturas: 50
- Usuario favorito de este poema: la negra rodriguez.
Offline)
Comentarios2
¿Un obelisco se cayó? ¡que lío se armó!, pobre perro y que sorda la lombriz quedó.
Un saludo amiguito y hasta otro versito. Bea.
jajaj el peroo es el culpab le?
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