HERMANA PIEDRA
Cuán rico es enamorarse de una piedra.
Sobre todo,
sí absorbió el calor del Sol y del Humano.
Un solo instante de reposo en sus calores.
Y una fiebre de sonrisas me acompaña.
Hasta volver a colocar aquella piedra,
para que atenta…
absorba hasta el final…
el fiero furor del Hermano Sol embravecido.
Poema inspirado en la vida y obra de San Francisco de Asís.
Alguna vez visité sus lares y sus bendiciones , siguen iluminando mis caminos.
-
Autor:
JUAN ROMERO SOTELO (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 6 de julio de 2014 a las 01:52
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 481
- Usuarios favoritos de este poema: grabra, Maria Hodunok., jorgeluisotero, María C., El Hombre de la Rosa, angeldelanoche, Raquelinamor, Edmundo Rodriguez, Eco del alma.
Offline)
Comentarios16
El poema me trasladó a un paraje frío y con sol en la alta montaña, donde me gusta sentarme a descansar en las rocas de granito pulidas por la erosión y calentadas por el sol
Felicitaciones por tan hermosas letras. La mística franciscana nos lleva a reconocer a Nuestro Dios en las cosas más insignificantes pero grandes por la creación,.
Hno,. Rafael OFS.
Nada es casual,tus bellas letras . . .hoy iluminan mi camino.Gracias por compartirlas.Un abrazo.
Hermosos versos que encierra el poema... recuerdan a S. Francisco, donde cada obra del Creador le inspiraba bellos versos.
Ha sido un placer leerte.
Un abrazo
Poeta son intensas tus letras, con un lindo mensaje, hecho en metáfora.
La fe, es lo que nos hace seguir viviendo.
Gracias por compartir y disculpas por la demora, no entro mucho a la página ultimamente.
UN PLACER LEERTE.
CARIÑITOS.
Inspiración perfecta a San Francisco de asis... (Orúla) en Religión Locumí.
este se ha caracterizado en abril los caminos... según la religión. eso dice el (e cuele, del Babalao).
me gusto pasar por tu rincón, siempre es grato recordar la tradición religiosa. aclaro, no quiero decir que el poema se trate de este tema. solo me vino a la mente el recuerdo de mi pasado...
me gusto mucho.
lo guardo y te dejo mi abrazo.
Menos da un piedra y se encuentra siempre en nuestro camino, quizás para que paremos a reflexionar, un bello poema.
Un abrazo y gracias Shira
Hermoso debería ser ese recorrido que te inspiró tan lindo.
Un saludo...y ah, yo colecciono, piedras cuando me voy de viaje, busco las más raras.
kitty
Una hermosa poesía que tiene el gran alma de la congregación Franciscana, que todo lo puede y todo lo conquista estimado amigo Juan Romero Sotelo.
Un placer haber leído tu poema...
Saludos de sincera amistad y afecto desde el Norte de España...
El Hombre de la Rosa
Muy original este poema, Juan Romero. Me gustaron tus versos, a pesar de ser breves. Un cordial saludo. Ingrid Zetterberg
¡Extraordinario! Sencillamente sin palabras, màs ¿Cuantas cosas simbolizan la piedra en esta tierra? y enamorarse metaforicamente de la piedra, magistral. Bien dicen que de lo bueno poco. Felicitaciones, gracias por compartirnos talento de su inspiraciòn. Reciba saludos de universal amor de raquelinamor
UN POEMA QUE IRRADIA LA PROFUNDA SENSIBILIDAD DE TU ALMA.-
UN CARIÑO EN LA DISTANCIA.-
MARGARITA
Muy hermoso has hecho que me sienta algo mística
Un abrazo.
Hermoso homenaje a quien era hermano del Sol y la Luna
Hombre que abandonó su vida cómoda por el sacrificio y el servicio a Dios
Gracias por compartirlo
Con aprecio
JAVIER
Hermosas letras , que me haces meditar que hay hombres que consagran su vida adiós, aun mas con eso pienso que dios es el único ser supremo sobre nosotros, que ofrendo a su hijo al sacrificio por amor a nosotros la humanidad, muy bello
Gracias por compartir saludos cordiales
Eco del alma
Amo cada cosa que leo de San Francisco de Asis, te comparto un poco de la poética de Jorge Robledo Ortiz, un Colombiano enamorado de todo lo Franciscano:
"Buen hermano Francisco: recoge nuevamente tu cayado y tu sayal de trinos y la doble humildad de tus sandalias; deja tu claro sueño de luceros y de gajos de luz y de mansos crepúsculos disueltos en albercas de nácar; abandona tu gota de infinito, tu principio de Dios, tu epifanía de silencios que suben al cordaje beatífico del arpa; olvida que tus pies ya descansaron en el primer remanso de la aurora y que tu corazón se hundió en la gloria desnudo como un ancla; renuncia a tus angélicas visiones, a tu coro triunfal sobre la muerte, a tu aleluya de varón ungido, a tu laurel curvado sobre el alba, y regresa a la tierra que ya el odio nos ciega los caminos y la sórdida arcilla, triunfa sobre las timideces de la Gracia".
aprecio inmensamente que uno de mis poemas le haya gustado. Saludos de DOMOTA
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.