AÑORANZA

HERRADURA

AÑORANZA

Estuve en tu casa, que pudo ser mía.

Saludé a tu esposa, que pude ser yo.

Besé a tus hijos, que pude haber engendrado.

Sentí tu hogar, el que yo te hubiera dado.

Todo era pequeño, como siempre he soñado.

Sin más ambición ni grandeza

Que la densidad de un amor

Por tantos años guardado.

Tus ojos estaban alertas, como águila,

atisbando cualquier movimiento incierto,

cualquier palabra o gesto

que me fuera marcando

 Tus hijos, calor de tu vida

y sentido de tu existencia

dejaron mi alma aturdida, ¡extraña vivencia!,

en dulce y tierno amor envuelta.

Son tuyos, tuyos y de ella,

de la mujer que envolviste en tu amor,

y en tus noches de pasión

engendraste tu cielo lleno de estrellas.

Y te dije, adiós …, suave, desapercibido,

como si nada sucediera en mi interior,

como se dice adiós a un amigo,

y te ví entrar en tu hogar con ella y tus hijos.

  • Autor: HERRADURA (Offline Offline)
  • Publicado: 24 de abril de 2014 a las 14:49
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 53
  • Usuario favorito de este poema: azazz.
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Comentarios2

  • lily natalia

    Rencuentro de recuerdos
    de un tal vez o un quizás
    de lo que pudo ser ...
    avanzar en ese momento
    es esencial para poder
    encontrar la respuesta
    de lo que no fue... todo
    tiene un porque al final

    bello poema
    saludos

  • HERRADURA

    Recuerdos de falsas promesas, desengaños que dejan cicartices en el corazón arañando hasta en lo más profundo del alma.
    Gracias por comentar. Un saludo tambien para ti.



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