Ahora ya no temo más, pues estoy entre tus manos
Esa delicadeza con que me recibe me hace desearle
Eres arena y espuma, Eres la crema y la fresa
Eres el cuero y el beso que deseo noche a noche
Señora ya no me suelte sus manos me dan placer
Su piel me alimenta su boca quita mi sed
A sus pies siempre estaré, eso me hace feliz
Ya no me importa lo que digan siempre estaré a su merced
Como muestra de amor infinito
De rodillas aqui estaré
Para que no quede dudas que el poder lo tiene usted
Y más porque no me ofende, pues soy yo quien lo grita
“Que soy un perro asqueroso” Basura que usted pisa
Quisiera merecer un día sus labios y sus caderas
Es que mi ama es hermosa, no hay hembra que la supere
Agradecido estoy porque su mano me toque
De la manera que quiera, eso es un gran placer.
Comentarios2
La mujer son sus encantos nos trata de embrujar y estando en ese estado todo lo que haga es placentero
Hermoso poema
Un abrazo desde Perù
Eugenio
Un poema muy diferente e ingenioso, con una buena perspectiva de entrega. Me gusto mucho.
Saludos del Oso del amor..
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