Llaves de vida...

Nos envían al mundo habidos de poner nombres a lo que sentimos, como si fuéramos diccionarios que encontraran una definición por cada paso que hemos recorrido, el hombre recorre más de una vuelta entera al planeta, da miles de millones de pasos, si por cada paso tuviéramos un significado, seriamos entonces un diccionario recorrido, pero lamentablemente solo dejamos huellas cuando olvidamos escribir un significado, porque cuando está escrito todo se transforma en palabras, queremos crecer en la vida, pero no lo hace la semilla por semilla sino por querer ser un árbol, ese deseo es el que naturalmente nos deja crecer.
Nos atamos, nos definimos, nos urgimos de caminos, cuando ni siquiera pasos damos para llegar a un destino, el principio era tan simple pero lo dejamos complicar, el destino era tan fácil de ver pero lo dejamos nublar, hemos venido a la vida a ser felices, pero nos dedicamos a sufrir, hemos venido a conquistar tantas cimas, pero nos quemados siempre en la misma montaña, Ni el mejor cerrajero podría encontrar el significado de tantas llaves que traemos en nuestras vidas, muchas no las usamos otras las utilizamos a medias, pero cuando abrimos realmente una puerta, no debemos preguntar si lo que encontraremos nos gustara o no, solo debemos agradecer de estar del otro lado, solo el cruzar ya es importante.
No soy tu destino, no soy tu felicidad, solo soy una llave mas con la cual abriste una puerta tan grande que se llama amistad y ya estas del otro lado, para que preguntar si podrás abrir mas puertas, para que comenzar a buscar nuevas definiciones cuando ya los pasos están dados; las puertas del pasado ya fueron cerradas, no esperes volver a abrirlas buscando entre las llaves que cargas, faltan aun tantas y tantas puertas por abrir algunas tendrán luz otras serán solo oscuridad, pero lo importante es que así como la semilla, seguirás motivándote a seguir a dejar de estar debajo de la sombra y convertirte en un árbol frondoso y cálido que acogerá a muchos que con sus llaves de vida pero cansados de vivir han olvidado que aun hay muchas puertas por abrir y que nunca sabemos lo especial que pueda estar del otro lado, solo lo sabremos cuando entremos ahí. No soy tu destino, no soy tu amor, no soy tu felicidad solo un cuarto mas que abriste y donde ya las puertas abiertas tendrás….