Réquiem por uno mismo

mario mena mena

                          - I -

En el principio todo era nuevo, nuevo de veraz

todos los paisajes parecían acabados de pintar

a tal punto que si uno los tocaba le quedaba el color

de su pintura untado en los dedos de niño.

 

Eran nuevas las palabras y tenía muy pocas

porque apenas había un puñito de ellas

y cada una tenía una acepción para el uso escaso

 

Ni qué decir de los sabores

cada uno era una fiesta de sorpresas,

sabor a guayaba, a papaya, y a cases

sabor de tortilla y la reina olla de carne

 

Y una constelación de legumbres y tubérculos

en la cocina de mi madre y la huerta de mi padre

ah, y el aire mensajero llevando sonidos y aromas

unos agradables y otros mejor no digo.

 

Eran nuevos los gestos, los misteriosos mensajes con los ojos

las conductas solapadas en el subtérraneo de las palabras.

Iban y venían los días de escuela, de compras en el tramo

de traer la libra de carne de todos los días

de bañarse un día en el tanque y otro en el río

y salir a cazar con mi perra porque sí, sin necesidad

Sólo porque me salía un cazador del fondo del alma.

 

Los días iban y venían sin nombre y sin número

alrededor de nada y hacia ningún lado

No estaban bautizados o no hacía falta,

solamente se pasaba un momento eterno

parado uno en un peldaño de un tiempo.

Parecía que todo iba a ser así para siempre.

 

Pero las épocas, igual que las gentes, mueren

y se fueron los floridos cafetales

sembrados entre inmensas fincas de silencio

sala de cantos de pajaritos, de piapias y oropéndolas

Todo se fue, de repente fue quitada la escenografía,

y donde quedó todo, voy a menudo en el recuerdo.

 

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Comentarios3

  • mario mena mena

    Saludos, hombre. Un gusto tu lectura y tu amable comentario.

  • El Hombre de la Rosa

    Hermosa y preciada ha sido la lectura de tus letras amigo Mario Mena Mena
    Saludos de sincero afecto de Críspulo

  • Miguel Vargas

    Amontonaste con tus manos un puño de recuerdos y bien atinados. Abrazos

    • mario mena mena

      Sí una especie de juego con el cual uno va al pasado, pasea, se sana y sirve para seguir andando.



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