Hubo un tiempo en que la noche se escondía frente a la decadencia. Las farolas torcidas y confiadas creían que podían contenerla. Las hoces, entonces segaban las hierbas que querían crecer más allá mientras la culpa era nuestra.
Lo cierto es que nos obligaron a nacer y ahora, todavía se quejan. Así es normal que yo prefiera seguir siendo el extraño. Aunque ya no existe la paciencia. Los asesinatos a la luz del día terminaron.
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Autor:
Poeta-Maldito1976 (
Offline) - Publicado: 29 de noviembre de 2013 a las 12:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios4
Hermoso y gratificante tu genial poema amigo Poeta-Maldito1976
Un placer leerlo...
Saludos de amistad de Críspulo
Tú sabes. Últimamente las noches se me hacen un poco largas y alguna cosilla me da para pensar. Aunque no creo que nada sea genial. Pero agradezco las palabras
Saludos
es usted un maldito en sus letras, y eso se valora no sabe cuanto, sublime, quiere mi amistaD?
Maldito? Según se mire. El ser humano da para mucho.
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