Estado de penumbra...

PETALOS DE NOCHE


AVISO DE AUSENCIA DE PETALOS DE NOCHE
Sangre oxidada...]




Es de noche, casi imperceptible para mi interior...,

es de sol, y quema, la taza fecunda el veneno...,
 

  triste es mi pasar por las telarañas
                        en el tejido áspero 
y suave, seré condición para la muerte...,

mis manos combaten fantasmas en la oscuridad

atardecen las cenizas que caen de mis ojos

en soledad anochecen mis piernas quebradas en el horizonte..., 
la sangre es traslucida-                                                       
mi sangre es invisible ante el dolor de las nubes,

                       cubriendo a la mujer sin cuerpo,  

caen toneladas de cielo en la techumbre

los gatos maúllan dolor en mis costillas,
los gatos maúllan punzadas de mi músculo
                                              ventrílocuo...- 


/Lucho contra una pared, lucho por vivir,
y mañana cuando mis ojos sean de sol,
lucharé por sobrevivir, lucharé contra mi> 

Esta oscuro,                                      
                     la noche es cada vez más invisible…, 

la muerte está en silencio envenenando mi cuerpo…,

arañas caen del techo,                                       
                            vienen de la fuente de lágrimas
del vestigio de mujer plateada que esta encumbrada en    
    el dolor de las nubes que hieren su rostro sin mirada,   
  con punzantes hundimientos en su permeabilidad ocre   
                    apaga el sol desteñido en mi almohada…,   

es de noche, de madrugada…, desnudo en las paredes
                                                    mi palabra calla,

desnuda y de madrugada la moneda sonámbula
               envejece la ilusión de las sombras…,

entre paréntesis el sol se hace agujero,
entre paréntesis mi expresión se hace vacío,
entre paréntesis los muertos inventan mi creación,

entre paréntesis un letargo se cuelga de mis párpados,

segundos miro mi boca callar siglos en un recinto dolido,
                                               -quebrado y sanguíneo-

las arañas caen de mis ojos,                                     
                             escriben veneno con sed de vida,

la oscuridad se hace temple de mis plagios íntimos

a una luna atesorando las punzadas de nubes adoloridas

... siento que duele, duele la oscuridad
en silencio duelen las palabras,
duele el suicidio de mañana,

duele mi boca, duele mi hambre, duele la esperanza,
duelen los sueños, 

duele la luna envenenada en un zumbido de porcelana,

                       lagunas mentales escriben penumbra

los dioses bajan del cirio                                         
humillados caen del Olimpo,                                     
                                    
la ilusión de los vivos
hace alquimia
fantasmas
en la oscuridad
siendo ellos sombras de una luna pegada en las tinieblas…,

sombras duermen en el sueño, un cama vuela en el mar,
                                                              nada tiene sentido –nada'r-

una lágrima puntiaguda envenena mi paz…,

dentro de una taza de café muere la esperanza…,

en la penumbra bebo el último sorbo de alma… 




...


 

  • Autor: Joel Parra (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 18 de noviembre de 2013 a las 16:56
  • Comentario del autor sobre el poema: No sé como sientan al poema, lo sientan..., me gustaría saberlo..., pero debido a mi luto íntimo, lo dejaré en silencio..., igual que esos ruidos de mi interior, igual que esos cuervos que llevan un pedazo de la memoria que no tengo, igual que esos recuerdos estigmatizados por las sombras que se ahogan en lagunas mentales, aquellas lagunas que ahogan mi libertad, sí tan sólo fuera libre! sí solamente lo fuera, no pasaría por estas penurias invisibles, no pasaría regalando mi cuerpo a la muerte, e anclando mi retina en las tenebrosas fauces del "quitarme la vida" no pasaría dejando mis ojos en la visión ocre de un sol muriendo cada día, no estaría sobreviviendo luchando conmigo mismo, no estaría hundiendo el lodo en la tierra de mis huesos, no estaría rezando calladamente oraciones para que mi cuerpo se eternicé en un poema imaginario, y que alguien abra el libro, lo abra y sienta las mariposas emerger de una cruda realidad que hace zumbido en mi cuerpo..., esas heridas, esa sangre de heridas, esas heridas punzantes, puntiaguda roja que ennegrece mi llanto, en silencio preservo el ataúd de mi cuerpo a un alivio de la noche, a una anestesia de los muertos, a la morfina de los caídos... Carta siete.../
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 79
  • Usuarios favoritos de este poema: Rocío V-P., Sara (Bar literario), Maria Isabel Velasquez, BlackVizard, Marisol-coincidir.
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