Lanzo la piedra
Pero no veis la mano;
Menos, mi rumbo.
Corazón fiero,
Latido necesario;
De un alma en trance.
Arrecian olas
Y escapan las gaviotas.
Veo el arco iris
Sonaba el trueno
Vibraba todo el valle;
Briosa berrea.
Sí, lluvia fuerte,
Copiosa y persistente.
Yo, siempre seco.
Suelta las hojas
El roble recio y fiel.
¿Ducho y feliz?
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Autor:
Rafael Pérez Ortolá (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 2 de noviembre de 2013 a las 14:16
- Comentario del autor sobre el poema: El instante nos abre muchos horizontes. Son las semillas de grandes pensamientos.
- Categoría: Haiku
- Lecturas: 309
- Usuarios favoritos de este poema: Violeta
Offline)
Comentarios1
muy bueno... te felicito
del alma en trance
nace la voz constante
ducho en el tiempo, en soledad
en obscuridad y silencios
en lo obtuso de un sentimiento fiero.
Gracias amiga.
Es bueno no salir del trance
Eso sí, con inquietudes, sentimientos, soledad, silencios, algarabía y alegría, que todo cabe.
Seguiremos en la brecha. Saludos
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