MIL TIEMPOS LEJANOS

      Con tan incipiente  viraje se te ve pasar por los aires sin pisar las olas del mar, es como percibir el tierno aroma de tu piel a canela.

Sin antes  escuchar caer la lluvia sobre los tejados, ya que las gotas que bajan  por tus mejillas forman los océanos navegados.

Aprovechando el nacimiento de las torrentes cuando logras al hacer el amor en secreto, mientras no se te termine las palabras  y descansas en silencio bajo el radiante sol. La conciencia va encerrándolo hasta hacerlo victima entre sabanas tenues.

Aunque dejándolo preso tras las rejas de tu amor,  siempre encontrara los aforismos que despierten aquellos pasos del caminante hasta llegar a las orillas del piso en falso. Para  rodearte con un abrazo, cual regocijante en la mente como el regazo de la trasmutación infinita en la  prodigiosa despedida.

Quedando abiertas todas las puertas para salir corriendo por los parajes desiertos de los sueños ocultos, te desapareces como una nube y no te dejas ver entre la multitud que te observa para saber de tu nombre.

Luigy