Que tonto fui/ me quedé sospechando de mi sombra/ te amé bajo que olvidado me dejaste/ no entendí/ Que tonto fui/ mi futuro fue lo único en mañana/ idealismo de uno solo/ me dormí/ Que tonto fui/ reprochando mi falta de simpleza/ repartía errores donde sea/ odio a todos y a la vida/ me morí/ Que tonto fui/ me escapé de los abrazos/ di los besos más amargos/ y mi alma se me iba en el fracaso de vivir/ Tonto idiota te das cuenta medio tarde/ que la vida de uno solo es entre todos/ que hasta el ego es construcción de los de afuera/ que los sueños son las hebras de madejas/ y el amor de tu pareja es todo el mundo que te enseña/ Hoy miro atrás/ y me duelen los años entre espejos/ entre negros aparejos que te elevan/ ya no más…/ aunque en mente tengo algunas cicatrices/ casi a punto de perderme entre los años lo aprendí/ Hoy soy feliz…
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Autor:
Fernando Gabriel Arrieta (
Offline) - Publicado: 28 de agosto de 2013 a las 12:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 31
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios2
"...aunque en mente tengo algunas cicatrices/ casi a punto de perderme entre los años lo aprendí/ Hoy soy feliz…"
Creo que a veces son necesarios todos esos traspies para aprender a ser feliz y entender lo que la vida realmente quiere de nosotros...
Un abrazo desde México...
Las geniales prosas que brotan de tu bella pluma maravillan al lector amigo Fernando Grabiel Arrieta
Abrazos de afecto y amistad
Críspulo tu amigo
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