NIÑOS INDIGO EN EL MUNDO DE LAS INTERFERENCIAS

Walter Trujillo Moreno

 En el tranvía amarillo, largo y oscilante como las miradas de sus ocupantes,
se desarrolla una historia,
que en mundos rígidos y grises,
se desarrollaría entre paredes y rejas.

 

Dos niños / jóvenes se enfrentan a empujones, miradas, gestos y palabras,
en sus pensamientos, sentimientos e ideas retumban las cascadas de Iguazú y la música de una arpa de cuerdas múltiples y coloridas,
ella vestida de armonía dulce,
cubierta de un tejido de poema soñado insoñable.

 

Como en un sueño se repiten las escenas de la disputa,
la cascada y el arpa de colores,
afuera cambian los paisajes, sus actores y dolores,
el tren como un gusano relinchante continúa a su objetivo previsto,
no repara en  situaciones sucedidas y repetidas en su estomago gigante / metálico.

 

*Los niños índigo antes de abandonar el gusano incontrolable,
cruzan miradas envueltas de emociones y telepatía,
se abrazan fuertemente y piden perdón mutuo.


En su  sonrisa brilla un sol intenso,
en su cielo de paz de mundos tiernos se despejan las nubes de odio
 y mal entendidos,
el mañana habré sus entrañas de historias  reales y cuentos sin moral ni moraleja.

 

 

Por Walter Trujillo, Julio 2013

 

*En este caso niños con el síndrome de Down, en culturas naturales  jugaban un rol especial, debido a su sensibilidad y cualidades intrínsecas. El adjetivo índigo, referido al color azul, surge de la creencia de que estos niños tienen un aura de ese tono, con  una vida espiritual, ética y mental avanzada.

  • Autor: Daquilema (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 30 de julio de 2013 a las 19:06
  • Comentario del autor sobre el poema: Este poema esta dedicado a la reflexión. Las reacciones inesperadas y no calculadas, son aquellas que están más cerca de la verdadera naturaleza del hombre!
  • Categoría: Reflexión
  • Lecturas: 381
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Comentarios +

Comentarios1

  • Mujer Nagual

    Que bonito. Te agradezco por esto. Yo tengo 15 años y muchas veces me han dicho que soy una de esos niños.
    Me gustó. Es una sacudida para algunas mentes que andan medias rígidas.
    Saludos

    • Walter Trujillo Moreno

      Me alegro por ti, esos niños siempre han sido y serán especiales,
      hay gente que no lo entiende; pero los que compartimos eso,
      sabemos que la sensibilidad y la pureza del alma no es una molestia sino un don divino!
      Un abrazo muy fuerte para ti y escucha siempre lo que dice tu corazón!



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