ES EXTRAÑO DEJARTE IR

Rosa del desierto

 

Es extraño dejarte ir, me imagino como el fumador que ve salir el humo de su boca, lo sigue con un una mirada de satisfacción, que dice que disfruto cada bocanada de aquel humo que lo daña internamente. Te veo salir de mí, volar lejos a otro cielo, pero dejando mi alma contaminada con tu recuerdo. Un recuerdo no me daña, pero quién sabe lo que hará el tiempo. Sólo lo sabré cuando llegue intempestivo con una nueva posibilidad de sentir.

Es extraño mirar atrás y avergonzarme de mi misma, de tanta insistencia, de tanta niñería (las cosas que hacemos cuando nos sentimos enamorados…) Llegué a creer que sentías lo mismo, por eso tanta insistencia. Me vi alcanzando las estrellas, caminando sobre el agua y tocando el centro de la tierra. Fue un simple espejismo ocasionado por mi ceguera. Ahora no puedo evitar sentir vergüenza.

Hoy siento que desperté de un sueño (o tal vez una pesadilla). Aún me siento medio dormida, pero veo, te veo partir de mí, no puedo identificar que te expulsó (o qué te está expulsando), sólo puedo sentir esta sensación de vacío que no me permite escribir. Perderte es perder un pedazo de mi que nunca acepté y que de alguna manera despido contigo. Se ha largado lentamente y me siento en duelo. Pero los duelos no duran demasiado tiempo, ya pasará.

Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.