Yo tenía un zapato, amigo mío,
que sembraba huellas en las piedras
era él un amigo de madera
una fiesta al caminar en cada paso.
Yo tenía un zapato, que sincero
conocía el solaz de los desiertos
era un brote de luz en la tiniebla
y el trinar del amor en el silencio.
Más la grieta del dolor le fue horadando
su textura de fiel aventurero
y en la fragua de caminos y quebrantos
se durmió, perdido en un potrero.
Tengo pies que lo buscan en el cielo
y los ángeles saben del secreto.
Más la tierra lo abraza tiernamente
junto al brote de un místico cerezo.
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E.D.A
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Autor:
Enrique Dintrans A. (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de julio de 2013 a las 22:17
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 3076
- Usuarios favoritos de este poema: MCarmenTalaveraMiranda, alex sandman.
Offline)
Comentarios3
Magnífico Enrique!!!..
Tus poemas dicen tanto. Con mucha metáfora y, es fácil entender los sentimientos y huellas que nos dejan los amigos "de madera".
Me apena que después de sus incansables aventuras se durmiera en un potrero.
Seguro que un ángel lo buscará en medio de los "trinos del amor"....
Saludos..
Gracias M Carmen, (¿Mari Carmen? )
A veces pienso en los zapatos, son tan útiles y van a todas, siempre protegiendo; es la prenda de vestir que más se parece al perro.
Recuerdas a mi hermana que estaba de cumple?
Pues ahora está muy feliz. Acaba de recibir a mi sobrina, que estuvo seis meses en Nueva Zelanda.
Abrazo
oiga, coincidencialmente esta mañana escribí algo de mis zapatos...
Y cuando llego al infinito
Velo el ataúd que ya no veo
Porque mis zapatos van sin preguntar
Gracias Alex, iré a leer.
Saludos
POETA ES LA PRIMERA VEZ QUE TE LEO Y LA VERDAD ME ENCANTO... ME HICISTE RECORDAR UN MONUMENTO A LOS ZAPATOS EN LA CIUDAD DE CARTAGENA ( COLOMBIA) MI PAÍS
FELIZ INICIO DE SEMANA
ABRAZOS DTB
Gracias, María Isabel. Me encantó la noticia de ese monumento a los zapatos, en la ciudad de Cartagena.
Saludos
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