El braceo, para allá y para acá,
de toda la vida, un proceso.
Que la intención, traiga mensajes,
primero, el sentido sensorial.
Explorando la superficie,
esto sucede en el principio,
parte de aprender a caminar,
conforme va abriendo el corazón.
Otro entendimiento más profundo,
contigo estar contemplativo,
natural, nada de máscaras,
cómo se anda, en el propio cause.
Los encuentros de las miradas,
ligero beso en tu cabello,
en las manos, roce ocasional,
anticiparte un pensamiento.
Estar ambos en la corriente,
nos baña su sabiduría,
un sentimiento de bienestar,
sombras se reducen por la luz.
No se cómo, explicarlo mejor,
como que ya te conocía,
siento mayor comprensión de ti,
sin tanto hablar de nuestras vidas.
En la memoria, acompañados,
hay mayor aceptación de si,
y como que cambian los demás,
cuando éste es de nosotros mismos.
La crisálida, está madurando,
se acerca el momento cambio gradual,
otra mente, con su corazón,
esta noche, te conozco más.
Tus espejos, descubren mi luz,
te tomo de la mano, juntos,
quizá nos conocemos poco,
empero, no somos extraños.
Vamos a caminar un poco,
los sentidos sienten el rumor,
de noche, bajo los árboles,
somos dos almas en su cuerpo,
viven en su mágico encuentro.
EL POETA DEL AMOR. 06-07-13.
CABO SAN LUCAS, BCS. MÉXICO.
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Autor:
arturo maldonador (
Offline) - Publicado: 7 de julio de 2013 a las 00:28
- Comentario del autor sobre el poema: Mientras más abra la mente y el corazón para escucharte. y más me aproxime a ser un espejo no nublado, para que todo llegue límpido sin mis prejuicios, paradójico, habré aprendido más de mi, por estar abierto a tu vivencia compartida.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 68
- Usuario favorito de este poema: mariarl.
Offline)
Comentarios1
que bello mi niño me encanta
es una bella manera de conocerse
Gracias por leer y comentar mis palabras.
En este momento se me ocurre, que no hay mejor manera de conocer mi propia verdad, en las palabras de su propia vida de los demás.
Y es que todos somos copias al carbón.
Que otra experiencia personal puede describir un ser humano, sino la propia, y sucede que esa es también la mía, porque somos hermanos, misma especie Homo sapiens y mismo orígen, del mismo Constructor.
En esta idea escribo CONOCERME EN TI.
Se necesita al otro para conocerme. Saludos.
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