A la Dulce Navidad

 

    Ha empezado la víspera de la hipocresía

Natividad pútrida sembrada en luces de negra fantasía

Cínica ramera con flores de caridad fingida.

 

Festividad sórdida - sola y vacía-

Hija ostentosa de la burguesía,

Mascota de cola larga -roja y blanca-

Y mil muérdagos con espinas.

 

¡Vomito oscuras blasfemias

                   Sobre tus pinos maquillados de garabatos y fruslerías!

 

Catedrales repletas de muertos

que oran de rodillas.

 

¡Vomito maldiciones amargas

                                    Sobre sus plegarías egoístas!

 

¡No soporto tu dulzura empalagosa!

                                                       De niña catecista

Me hastían tus muecas de gloría

y tu sagrada familia.

- No quiero pagar por orinar,

                                            mejor lo haré en sus vitrinas-

oh! y defecaré verdades sabrosas

         mientras dicen nebulosas mentiras

y sí cantan villancicos...

                               Yo haré la Opera de la Herejía.

 

 

   "Oh! Satán!  Vestido de hermosa poesía

                                  Devórate al mundo!

En tus fauces de hierro

y en tu lengua de brisa.

¡Destrúyelo Todo!

¡Todo!

Y a mí, el maldito,

A mí, si es preciso."