Que te cuesta ,subir la cuesta
vez que no duele y si se puede ,
olvida en la cesta la siesta,
no es difícil ,cuando se quiere ,
adelante arriba el semblante
no pares ,abajo esta el hares,
calcinante infierno de dante,
tal vez glaciares, estelares,
no vallas para atrás jamás,
ni buscando ,convulso impulso,
no vuelvas y ve a donde vas,
sigue tu pulso aun sea insulso
sigue adelante caminante
sigue el camino que el destino
triunfante en tan solo un instante
te hará un profeta o un adivino
que te cuesta subir la cuesta
vez que no duele y si se puede
olvida en la cesta la siesta
no es difícil cuando se quiere.
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Autor:
Mario Recamier (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 29 de junio de 2013 a las 15:37
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 53
- Usuario favorito de este poema: mariarl.
Offline)
Comentarios1
Muy bien: está dicho en fácil lo difícil, "subir la cuesta"; pues qué bien, pues anima y tiene forma de canto de cuna.
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