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,
como aquel pájaro
seco
en un hilo cordel de los milagros
telefónico de tanta espera por mensajes
del mundo ya extinguido
y que no llegan a tiempo
seco quedó seco quedé seco de todo
Yo
demasiado imperecedero doy siempre
a la misma calle larga en silencio hospital
sin embargo
acepto perseguir al hombre tenebroso
quien tropieza con la misma piedra y suerte
pero no quiere darse cuenta de la repetición
Nadie me espera
nadie me sigue
y aquel sujeto tan similar que podría
tomarse por reflejo
no parece advertir mi presencia atrás
en medio de tinieblas
fijo de sólo pensar
Ando a la deriva
entre tanta sequedad de garganta
de vientres de apetencias
por la inmensidad que de a poco
va adueñándose de mis ojos
y de cualquier otra vista
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Autor:
Albin Lainez (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 22 de mayo de 2013 a las 04:19
- Comentario del autor sobre el poema: engaña el ojo al frágil testigo del suceder inaudito del mundo
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 51
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios2
Tiene poesia, adelante, sigue asi... carlito77
interesante tu comentario, y sí lo que busco es que se sienta la poesía en mi obra, abrazos
El suave sonido de la pluma se enamora de las letras cuando escribe tan hermosos versos amigo Arlan
Saludos sinceros de amistad poetica
Críspulo Cortés Cortés
saludos y gratitud, amigo Críspulo!
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