No me preocupo por la edad de mi cuerpo,
Me preocupo por mi edad espiritual e intelectual.
Aquella edad que define lo que soy y como soy.
Aquella edad que no se mide en números,
Sino en experiencias.
Aquella edad que me hace más humana y consiente.
No me importa si tengo arrugas o canas,
Si mi cuerpo ya no puede andar,
Si mis huesos se quiebran con facilidad.
Sólo me importa tener imaginación para crear
Poesía, arte, música.
El día que no pueda hacerlo,
Ese día sabré que estoy vieja,
Y quizá a punto de morir.
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Autor:
Saray (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 20 de abril de 2013 a las 02:06
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 70
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, eoreyesg.
Offline)
Comentarios2
La edad es el tesoro de la esperiencia amiga Saray
Buen poema
Saludos y amistad
La edad intelectual, muy buen punto para esta hermosa poesía. Uno podrá ser muy joven, pero las mismas experiencias nos hacen ser mas grandes que nuestra edad corporal. ¡Muy hermoso tu poema!
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