Combinación hechicera.
Frutilla, sus labios.
Kiwi, sus ojos.
Almendra, su tez.
Nuez, su cabello.
Y él la ingería.
Ella respondía.
En sus espejos turquesa
veía reflejada
su propia belleza.
Besaba el bosque de su pecho.
Regresaba al rosa
que repetía
Te Quiero.
Entrelazados.
Morfeo los elevaba.
Y cada noche
sobrevolaban
una ópera diferente.
A las ocho
se esfumaba esa magia.
Despabilados
comentaban vuelos.
Todos los días
se comían lentamente.
Ritual exquisito
para cada sentido.
Una noche
tapó su delgado cuerpo
con frutos rojos.
Entre ambos
los convirtieron
en el más
sabroso manjar.
Hoy son felices
con la fórmula
del apetito eterno.
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Autor:
Meri (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 21 de marzo de 2013 a las 00:04
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 42
- Usuarios favoritos de este poema: Héctor(micorazón), Andrés Mª, Jorge G Sifuentes, El Hombre de la Rosa, Luzbelito, Cock.
Offline)
Comentarios4
Ese apetito eterno es el que hace que ese manjar del amor sea atractivo, sabroso y exquisitamente deseado.
Abrazos del corazón.
El Poeta del Amor
Sí, verdad? =) Es una rica combinación...
La gesta de tu pluma maravilla al verso en el día de la poesía mundial estimada poetisa y amiga María
Saludos de afecto y amistad
Críspulo
Gracias Críspulo! Un abrazo fuerte!! Felicidades!!
Buen apetito y curioso poema ..
Abrazotes y besotes, Maria!!!
Lo mío pasa de ser "terrible" a ser "extraño", verdad? Un besote!
Sólo es dinamismo!!
Besotes!!
Wow!! me quedé sin palabras Meri! Sigo embelesado por tanto manjar de metáforas rebosando mi apetito poético...Una verdadera belleza, un placer enorme degustarlo...Besotes enormes!
Luzbelito
Pero qué halago!!!! Gracias Amigo!! Que descanses!!Besos!! =)
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