Viejecita hermosa, tierna y amorosa,
La vida te ha endulzado con los hechos que hoy añoras
Sabes que se acerca un nuevo despertar
Mas al de ahora te aferras y lo quieres prolongar.
Aún te dice la vida que hay tanto por qué danzar
Y al candor de tu mirar te veo siempre soñar,
Asoma la nueva aurora, un día más a disfrutar
Pues bien viejita mía, no debemos demorar.
Desenredas tus canitas, el vestido...no al revés,
Un poco de cremita y no olvidas tu loción,
Pues si aunque arrugadita aún es fiel el corazón
A las dulces sensaciones del querer mirarse bien.
Mas, gastados tus ojitos que no puedes ya ni ver
Vas tendiendo tus manitas al camino recorrer.
Toma mi mano viejita, solo yo sé...
Cuánto de ti tengo que aprender!
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Autor:
Peregrina (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 14 de marzo de 2013 a las 14:19
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 182
- Usuarios favoritos de este poema: Luhiv Luphin, Viento de amor.
Offline)
Comentarios2
qué ternura ... ‼
se oye el canto de alma de hija
bajo el impulso de aquella mirada tierna
de tu madre devota y sabia en enseñanzas
que digna lo alabas ... merecido ‼
Un abrazo fraterno
Muchas gracias por tu gentil comentario. Ofrezco un tributo y reconocimiento a nuestros ancianos, tantas veces despreciados. A veces no los valoramos cuanto lo merecen.
Otro abrazo amistoso para ti.
Peregrina.
Que tierno corazón para escribir a tu viejita, sabes que todos debemos estar preparados para recibir a la vejez que sin duda será mas llevadera con hijas como tú. Es un gusto leerte Pere.
Saluditos
Mallito
Hola Mallito, como dices...hay que prepararse pues hay que saber envejecer. Pero cada etapa de la vida tiene sus alicientes. Solo hay que verlos.
Gracias por acompañarme en mis letras.
Con amistad...Peregrina.
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