El niño y el Limonero

Habia una vez un niño llamado: Hohenheim, vivia con su madre: Gretchen a lo largo de la costa de las tierras heladas del Norte en: Kongeriket Norge, Hohenheim tenia los ojos azules, el cabello rubio ,un bello rostro, una mirada clara y calida que lo hacia destacar de forma prominente de las demás personas, entre otras cosas  a él le facinaban las manzanas, le gustaban de todo tipo: verdez,Gravenstein, rojas,Golden Delicious,blackjohn etc... y en todas sus presentaciones:  cruda, cocida,en puré, en ensalada,con caramelo, soda de manzana entre otras... pero  su plato favorito era por su puesto y sin duda alguna el pie de manzana.

Gretchen cada fin de semana le preparaba su plato favorito, el cual Hohenheim disfrutaba sobremanera, pero las cosas  un dia cambiarón para Hohenheim, pues su madre al ver que su rendimiento en clases disminuia según sus profesores dado a su pereza y falta de interés en clase, Gretchen decidió castigarlo, ellá como una buena madre sabia las cosas que Hohenheim más amaba adémas de ella, claró y eran: las manzanas,el dinero y los jugetes.

Así que ellá decidío castigarlo quitandole los jugetes, sus dominicales y su amado pie de manzanas, el niño lloró, pataleó y gritó... pero nada pudo cambiar la decición de su madre la cual enojada le explico las razones de su decisión, le dio unas buenas palmadas y lo envió a su cuarto, y no conforme en vez de darle cada fin de semana un delicioso pie de manzana decidio darle una torta de espinacas con brocolí, el niño Hohenheim aún así después de lo ocurrido, era muy obstinado el no pensaba en mejorar en sus estudios, el preferia estar en su cuarto pasando las horas mesiendose en su banca,con los cuadernos sobre el escritorio, mientras sosteniá un lapiz en la comisura de sus labios, y pensaba en los tiempos en que disfrutaba sus jugetes,junto con su mesada dominical y sobre todo la forma de volver a probar esas deliciosas, jugosas y sabrosas manzanas que tanto anhelaba...

Un día cansado de la rutina y de rogarle a su madre que le devolviera lo arrebatado, tuvo la idea mientras meditaba en su alcoba de la misma forma habitual de siempre,la idea de ir a la tienda de semillas, pero el no tenia dinero, así que decidió: "tomar algunas prestadas" después de todo ¿a quién haría daño?...


El chiquillo fue a una Tienda de Horticultura  cercana y cuando vio a  a la mujer que atendía el lugar distraerse, tomo rápido unas semillas de manzana de un estante e intento huir, pero justo en el momento de cruzar por la puerta, la señora  detuvó a el chico asustado giro y la señora que atendia el lugar le pregunto para que queria esas semillas y él le dijo que queria plantar un arbol de manzanas, para no tener que volver a trabajar en toda su vida, que el solo comeria ricas y deliciosas manzanas y haria una casa en el arbol, para no vivir  más con su mamá que era mala por que no lo dejaba hacer lo que el quería, La mujer sonrió por la ingenuidad del muchacho, pero siendo una persona bondadosa , con un poco de malicia le dijo: espera esas semillas no te servirán necesitas estas... y le entregó un pequeño sobre con unas semillas con un fragante olor y el niño Hohenheim tomo feliz y sonriente las semillasy luego se marchó corriendo.

Cuando llego a casa el chiquillo el chiquillo no tardó en darse cuenta de que no tenia un patio donde plantar y cuidar el árbol, así que fue donde su vecino y amigo leonard y le dijo: leonard querido amigo,me pudes ayudar por favor, me puedes prestar tu patio, es que quiero sembrar un árbol pero no tengo un patio donde sembrarlo y si me ayudas el árbol seria de los dos.  ¿te gustaria tener un arbol de manzanas?  comeriamos todos los dias ricas manzanas y haremos una casa en el arbol, y yo no tendré vivir más con mama ¿que dices me ayudas? y leonard algo sorprendido pero entusiasmado acepto.  

Así el tiempo paso, Hohenheim y Leonard cuidaron muy bien del arbol, este no tardo en crecer y a los pocos meses este comenzó a dar sus primeros frutos, pero se llevaron una gran sorpresa se llevaron cuando vieron que el árbol de manzanas daba frutos de color verdoso, Hohenheim intrigado decidió probar de aquel fruto y al probarlo exclamo:Esto no es una manzana, uaghh... que asco, es un limón, yo no quiero limones son muy ácidos y amargos, ¿que se supone que deba hacer con esto? que rabia... sabes que leonard, toma el arbol te lo regalo, la verdad no se que hacer con él, no me sirve para nada, no quiero volver a saber nada de este tonto arbol.

Leonard que era amable,bondadoso, de un animo sereno, frió y calculador, asi que acepto más sereno el hecho de que fuera un limonero y no un manzanero el árbol, curiosamente por aquél entonces el pueblo estaba pasando una ola de calor que asolaba a toda la región, era el verano más cálido jamas registrado, algunos atribuían este hecho por la contaminación en el aire y el efecto invernadero en la capa de ozono, pero para leonard esto fue una oportunidad, la cual no desaprovecho se le había ocurrido la idea de montar un puesto de limonada en frente de su casa, el árbol había madurado y daba una buena cantidad de frutos, la gente con ese calor era capaz de tomar lo que fuese y dado las circunstancias leonard acepto el reto.

Para sorpresa de el solo fue cuestion de montar el puesto, tener los elementos necesarios: una cantina,una jarra, mucha agua y un poquito de azucar en la vida  y el resto ocurrio como por arte de magia: todos los vecinos y aun uno que otro extranjero y sobre todo: la mayoria de los conductores que transitaban por aquella calle iban en busca de una bebida refrescante en aquella terrible ola de calor, y para sorpresa de leonard este no tardo en conseguir el dinero necesario para cumplir sus anhelos   gustos, deseos y/o caprichos, por ejemp0lo se compro una bicicleta,  un telescopio profesional, por que el era un aficionado a la astronomia, y algunas cosas más entre jugetes y lisonjas.   Lo que leonard no sabia era que  tan solo la  corta edad de 12 años habia hecho historia, el era un pionero, era uno de los primeros jovenes en 1963 de los que se tenga memoria en montar un puesto de limonadas, como ustedes ya sabrán, al poco tiempo se volvio muy popular entre los jovenes de su edad la modalidad  de montar esta clase de negocios, tanto que hoy en dia  se calcula que en tan solo en  los Estados Unidos hay alrededor de: 2,693,625 puestos  de limonada, bueno el resto es historia...

Pero lastimosamente para Hohenheim las cosas no fuerón tan brillantes, pues mientras veia por la ventana a su amigo leonard atender a la clientela y contar a manos llenas la cantidad de norsken krones es de decir: coronas, y uno que otro øre, hohenheim a su vez se tenia que conformar con ver en su plato el plato que mas detestaba torta de Brocoli con  Arroz y puré de papa, ese dia Hohenheim solo inclino su rostro sobre el plato, su rubia cabellera cubrio su rostro, las lagrimas que brotaban de sus ojos empezaron a rodar sobre su bello rostro y apenas con gran dicimulo y  muy sutilmennte se alcanzaron a escuchar algunos que otros sollosos.