¡Ah!
con mi soliloquio
dentro de paredes cansadas
como la vida recorrida
en un mercado sin almas;
risas idas,
puestos apolillados.
¡Ah! vida
qué me has enseñado
qué no he escuchado
cuándo has empezado.
Jinete sin caballo
a pura calza
a ningún lado he llegado.
¡Ah! ... inutilmente
quemaba sus cabellos
mi madre...
cuando yo anciaba la muerte.
¡Oh...!
Si he vivido hasta hoy
es por ti madre
Oh madre mía
quiero irme antes de llorarte
Que mis ojos
no quieren enterrarte
Con legaña y moscas
y cabellos tirados embolverme
De mi boca sangre brota
en el papel manchado veo mi hora.
¡Sangre!
o sí... mi sangre!.
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Autor:
shao (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 18 de noviembre de 2012 a las 17:27
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 139
- Usuarios favoritos de este poema: María de los Angeles Bastianelli, Sara (Bar literario), LORRAINE0826, rosi12.
Offline)
Comentarios2
🙁
me sigues impresionando Shao
así?? y por qué?
porque este poema contiene el nivel de oscuridad, caos y tristeza que suelen impresionarme
normalmente escribes de amor, o de desamor o lo que provenga de él
pero esta vez cambiaste los verbos y accionaste una realidad totalmente diferente
no sé si pueda tratarte como niño ahora
es mentira..siempre te trataré como niño
Hay 3 comentarios más
Un argumento que deja atrapado con palabras de vida y esencia.
Me encanto.
Saludos¡¡
Hablar de mi madre y pensar que un día morirá
me hace llorar...
Si a nadie le gustaria que un ser tan bello e importante se aparte de nuestro lado es un miedo que debe ser duro de superar. Una realidad latente y un presente que debemos llevar con ella.
Hay 1 comentario más
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