EL VACIO LLENO DE FIGURANTES

carminha nieves

                         

 

Una cruz de florcitas blancas, e amarillas, una guirnalda, de igual color, una vela blanca en el medio, he puesto en el cementerio, a mi marido.

Su cruz ya terminó  junto a Dios   no sufre, era un ser integro, trabajador e su honestidad era enorme. Su palabra tenía más valor que su firma. Como hombre era  así. Nuestro vivir era privado, solo a los dos pertenece. Me he quejado de muchas cosas, pero eso  solo me dice respecto a mí.

Nunca le he deseado mal, solo quería que fuera feliz e que su manera de ser para conmigo cambiara.

Así, me fui al cementerio, alma limpia, mi compañero, asistente e  amigo también. Día gris, frio, al llegar, parecía que era una romería, toda la gente  vestida de oscuro, ropa nueva, mirándose unos a los otros de reojo.

Llegada junto  al panteón, de granito negro, se me cayó el alma al suelo. Un  centro en el medio de las tres , atrás,  en la de mi marido, una   flor rojo oscuro, puestoa en la piedra. ¡Que tristeza! ¡Que oscuridad! ¡Que diferencia de cuando  hacia yo los centros! Con cariño puse la cruz, la guirnalda, e las velas blancas.

Como si lo vieran, se alegró el negro, cogió luz, una lágrima me cayó, allí estaba la familia de mi marido, casi no la conocí,  pero la respecto.

¿Donde están los hijos, nietos e todos que  recibieran  sus pertenencias, que heredaran, mismo que solo fuera su cariño?

¡Que pobre e ridículo es el ser humano! Centenas de personas, solo vanidad, criticándose unos a otros, Pasan un año sin poner allí los pies e  solo para  hacer de cuenta en estas fechas, imponen su garbo, como si de un concurso de modelos fuera.

El día uno es el día de todos los Santos, el dos,  es el verdadero, el día de recordar a quien ya se fue.

Con modestia,  pero con mucho cariño, casi avergonzada, una cruz allí ha quedado, sencilla, bella e con el frescor de un beso  leve e suave.  Me representa, pero de los espinos hice flores, es mi destino, lo acepto,

Todo el día anduve pensando que la vida no es ingrata, no, de la familia sí.

Que descansen en paz sus almas, por mi e por los otros les pido perdón, por tanta  falta de amor.

Oporto 2 de Noviembre de 2012

Carminha Nieves

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