Tengo en mi pecho
clavada una espina.
De una rosa
que dentro de mi, agoniza.
De una flor
que se marchita.
De un pétalo negro.
callendo putrefacto, al suelo.
Tengo en mi pecho
una rosa muerta.
Una flor sin hojas
una noche sin sombra.
Tengo en mi alma
una rosa que sangra.
Una luna sin sol
una noche sin mañana.
Tengo en mi pecho
clavada una espina.
De una rosa
que dentro de mi, agoniza.
De la muerte
que duerme acurrucada
en mi vientre.
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Autor:
debora pol (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 28 de septiembre de 2012 a las 06:13
- Categoría: Triste
- Lecturas: 98
- Usuario favorito de este poema: El Hombre de la Rosa.
Offline)
Comentarios4
Excelente forma de escribir poesía usando como metáfora la hermosa flor que es la rosa....bella....un saludo
Muy lindo y oscuro! me gusto! abrazo!
Una bella y filosofica manera de declarar la pasión personal del autor
Un grato placer leer tu especial poema.
Saludos y amistad
Una espina de dolor incrustada en las paredes del alma...
Bellisimo en su azul!
Besos, amiga!
Rocio
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