Amig@s

Hoy, un día de todos los días en que la vida te aparta, te deja ser el centro inmerecido de inextinguibles, inmortales y extraños tesoros que llaman amigos, extraños seres que pueden vivir sin oxígeno, recorrer tiempos y distancias sin agotar su existencia, sobreviven incólumes a la pena y al silencio. Sus palabras son luces que agrietan la soledad, amasan caricias al oído del alma. Son alas cósmicas vestidos de humanos para confundir su linaje celestial. ¡Qué cosas con esa rara especie! Aman sin celos, ni sexo, ni besos, ni miradas pero abrazan a kilómetros, mares, países, idiomas y calendarios con la fuerza de la presencia. ¡Qué mala memoria tienen¡ Olvidan todo lo malo. Tan terco es su corazón que estoy seguro que más allá de la vida te acecharan el corazón con su lealtad, para hacer la misma necedad que hacen acá: darte sin esperar nada. Tan necios son que no te dejan ahogarte en las lágrimas, te acolchonan en los traspiés, te tornan en muchedumbre la íntima soledad. Son sombras que iluminan caminos, poesías que amorran las guerras, son refugios descomunales de tiempos que abrigan la nimiedad de nuestra existencia. Cada uno de ustedes es el amor que supera al amor, por llevarme a la encrucijada rica de la infinita gratitud

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