HERVIDEROS INDESEABLES de CARLOS A. BADARACCO

CARLOS ALBERTO BADARACCO



 

 

Bríndame cisnes vetustos, un par de escarbadientes,

un cerillo encendido y un alcornoque en llamas ,

atiende luego mis  dolencias, mis afectos corrompidos,

un efímero sentido de lo humano, entrégame.

Me defino como un predestinado,

un ente que se ha contenido en mi ser,

la mágica sensación de lo intangible.

Una luz incandescente

se enciende en mi intelecto como una luciérnaga letal.

Como un lucero se elevan los ojos al cielo,

como ardiendo mis emociones

y aunque los senderos de la vida se acorten  en cada paso

me levanto sugerente como una serpiente,

con alusiones a tormentosos  deseos  irreverentes

que siempre detonan entre  conscientes avideces.

Bajo el cielo azul estrellado mis codicias se enaltecen,

entre los dientes de los zorros está cada presa encerrada.

Enséñame tu amistad, enciende las hogueras de los infiernos,

alza cada vez tus ojos, advierte tus sortilegios

que yo disemino  mientras tanto mis cimientes

gota a gota por aquellos hervideros indeseables...

 

CARLOS A. BADARACCO

20/6/12

DERECHOS RESERVADOS

REGISTRADO  EN safeCREATIVE

Llevate gratis una Antología Poética y suscribite a Poemas del Alma ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos Novedades semanales



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.