Solo tú, silencio
Taladrando las paredes
Gritando su nombre
Mis manos arañando el viento
En busca de su cuerpo
La noche hablándome por señas
De su ausencia
Y la negritud gritando soledades
Sobre mi pecho
El fuego de sus besos
Quemándome las sienes
Y los recuerdos mordiendo el tiempo
Solo esperando que el silencio
Me dé espacio
Para olvidar que la amo
O para amarla en el olvido
Y ese silencio que aturde y atormenta
Que asalta con imágenes la memoria
Que moja mis sabanas de melancolía
Que acecha mi sueño y lo posee
Y a pesar de todo te respeto, silencio
Y te acepto como castigo o premio
Porque cuando me amó también estabas
De testigo de sus ganas
De su prisa por abrirme sus alas
Y dejarme beber en su arroyuelo
De tatuarme con su piel sobre mi piel
Y recorrer mi planeta de ansiedades
Porque, tu, silencio
Ahora eres mi mejor compañía
Interminable melodía si la pienso
Cómplice de mis manos, si la ansío
Que deja escuchar mis humedades
Y mis erupciones amatorias
Capturándome in fraganti si la siento
Por las noches cuando clamo su presencia
Tu, Silencio, omnipresente
Me dejas escuchar de su amor, el eco.
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Autor:
Pedro Luis (
Offline) - Publicado: 26 de diciembre de 2011 a las 21:02
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 117
Offline)
Comentarios4
Pedro, el silencio no es mala compañía, solo es malo cuando nos quedamos con nuestras propias fantasías, si uno pone los pies en la realidad, el silencio nos hace ver las cosas en su justa medida.
El poema es muy bueno, con mucha intensidad.
Un abrazo y Muy Buen Año
Claro, por eso digo que es mi mejor compañía, sobre todo propicia la evocación. Gracias por tu comentario, y te deseo lo mejor del mundo.
Hermoso poema querido amigo, tiene sustancia y esencia ! 🙂 DIOS te bendiga
Amen. Igualmente y gracias por tu comentario y por la bendición.
Y gracias a ti por leerme, Un Abrazo...
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