A la Conciencia colectiva

Observa Patria mía, Observe Continente
Ya vienen despacio, arrastrando la muerte.
Bolívar ya lo decía y lo definió como serio
Por eso propuso unir nuestros pueblos.

Vamos raza humana, que no quede en intento
que la libertad de pueblos, no es solo un cuento
dejemos atrás los lastres, de una sociedad suicida
busquemos unir las mentes, corazones y poesía,
que de grandes sueños el hombre logra fantasías,
que se vuelven realidades, con el esfuerzo, día a día.
Vamos y hagamos caminos,
que nos dejen mejor destino, uniendo los corazones,
la sangre, la sal, el pan y el vino.
Hagamos de esta tierra, un mejor lugar,
donde sin duda viviremos todos a la par,
siendo lo que se supone debe ser la humanidad
viendo unida y junta desechando la vanidad
siendo honestos y sinceros en el diario tratar,
logrando que en el futuro, alcancemos igualdad.

vamos soldados que la patria es nuestra
vamos que la valentía nos acompaña
los allegados y consientes
no comprenden esta tierra
no son buenos para entender
pero vosotros entender esto
no más guerras y sangre
esto esta cada vez más lleno de lujuria
nuestras almas nos pertenecen
hagamos que vuestras nos quieran
como nosotros la queremos
cuidemos a nuestro pueblo
cuidemos de nuestro lugar en esta tierra

Aquí todos hablan de libertad,
se atormentan frente a las injusticias,
rasgan de terror sus camisas
como queriendo gritar,
pero el hambre destruye los ojos
del niño que ya tiene su mañana en el horizonte,
escribiendo poesías los profetas
el niño duerme en cualquiera parte,
no quiere llegar a su rancho,
yo escribo de su dolor, me creo un héroe
tal vez ese niño no ha comido
y yo inspirado en su miseria
escribo rimas, quedo dormido

Vivimos en caos completo...
Echamos la culpa a un hombre
mas él no estuviera allí
si no lo hubiéramos puesto.
¿A qué tanta queja entonces?
Culpables somos nosotros
pues caminamos a ciegas,
sin valor para asumir
fuerza para deslastrarnos
de aquel que nos defenestra.
Ya trabajar no queremos
nos gustan más las limosnas
que nos da el todo lo puedo,
nos quedamos sin verguenza
vagancia y comodidad,
espíritu, alma, carcomen,
por eso...nos tienen presos.
(MIRIAM RINCÓN U.)

Señor don justicia, Hola, ¿Como le va?,
aquí tiene 10 centavos, para mi libertad,
déjeme y le leo la cartilla ficticia de hoy,
aquí dice respeto impunidad libertad e igualdad,
o ¿no sabe leer?, ¿tampoco escribir? oh, que calamidad,
así lo tenemos que respetar,
porque es usted quien representa ¡nuestra autoridad!

Ensordecidos hemos bebido la luz
con el soplo perdido de la megafonía.
Indispuestos a la suela de la oscuridad
nos hemos apretado en un vómito
que aposenta sólida y rugosa marea,
limítrofe ante los espantados incrédulos.
Ya no escuchamos la noche, la diferimos
para que los postreros adviertan la migaja
que tintinea aún de testuz siliconada.
Ensordecidos comprendimos el silencio,
ese que ataron como claustro,
y nos aupamos marchando sobre palabros
con todos esos intereses malintencionados
delimitándonos al auspicio del abismo.
Sordamente, enmudecido vuestro tesón impune,
tened bajos los ojos, que salimos de la caverna.

No desalientes tu esperanza.
Sostente sobre los lirios que florecen
y perfuman los gritos venideros
de los que en desespero en esta tierra mueren.
Suspira tus deseos bien profundos.
Mira a tu alrededor con profesía
Verás que los dolores se disipan
al amparo de tu Dios que te emancipa.
Siembra amor por los valles desolados
que te impulsa germinar aquí en tu vida
la libertad que te brinda la esperanza
que se embriaga en la conciencia colectiva.
LEO HENRY

Un canto de esperanza,
un canto de amistad,
a unir nuestros pueblos...
la magia de soñar,
soñar un mundo unido,
sin leyes ni fronteras,
cantando todos juntos...
el himno de la paz.
YOLANDA BARRY.

Me robaron la sonrisa,
me dejaron sin poesía,
la vida está hecha trisa,
gracias a la hipocresía.
Hombre, por tu boca sale,
lo que guarda el corazón;
no cambiaras el mundo,
sin antes entrar en razón.
VITA