A mi dolor de años

He pasado años en cuestión de segundos
Y enterrado los recuerdos, cuanta maleza
Quedose la memoria en algún lejano fondo
Dentro de libros inéditos, no tengo certeza.

No sanan las heridas, ni con entregado cuidado
Y fijando la causa en su merecedor olvido
Dadas las circunstancias de su bien apartado
Me siento aun mas ausente, aun mas perdido.

Heme aquí curado de  malestares desdichados
Envuelto de pureza late levemente un corazón
Mas la injusticia levanta mis manos esposadas
Ante la multitud que grita con ocio y sin razón.

Dese el dolor con su tenue risa, ¡tan irónica!
¡Hoy pude ver la verdad oculta de mi infancia!
Y sé que no existieron las palabras mágicas
Para ahuyentar de mi tanta irrelevancia.