Se acuesta sobre un montaña
para cubrirse con una manada de aire.
Su pelo fertiliza la tierra,
su piel alimenta las nubes
cuando duerme.
La niña llora ríos cristalinos
mientras su madre le compone
una canción de despedida
con el viento:
"Aunque corten mil veces mis raíces
mi savia siempre bailará en tus venas"
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Autor:
Jef (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 11 de septiembre de 2011 a las 15:52
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 39
Offline)
Comentarios3
Que bonito!
Saludos
Gracias!
una fiesta natural!
jaja cierto! no se porqué estoy tan verde ultimamente pero me gusta
estas de mucho colores
Es un encuentro natural de dimensiones, tan interno y tan personificado en la verdes lágrimas de la vida.
Me encanto ese cambio de caricias a lágrimas...
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