Carta de amor para ti.....¿Sabes? Que soy esclavo de tus besos

Soy ese fuego que arde en el ámbito de la locura,

Ese fuego que prende al corazón y a la carne.

 soy la magia de tu pensamiento, Soy tu recetor,

hasta mi llega,

el sonido de tu respiración,

un sonido que solo percibo en mis sueños de poeta,

en mi alma enamorada en mi subconsciente.

Imagino…si, imagino, tu frágil figura bajando de la nada, 

para posarse en mi lecho y prender mi piel entre caricias volcánicas.

 Es imposible no morir de amor al tacto de tus aterciopelados dedos,

al sentir tu aliento tan cerca de mi boca,

boca hambrienta de ti, de tus labios y tu piel.

Es imposible no morir de amor teniendo,

tan cerca tus labios,

 labios que dan la vida que rejuvenecen el corazón,

que crean savia nueva en el alma y en la sangre,

 que trastornan la mente,

que hacen hervir el elixir del amor,

amor que tengo guardado tan dentro 

para sacarlo y sembrarlo en ti,

 en tu interior, en tu jardín prohibido.

Es imposible no morir de amor,  

teniéndote, entre mis brazos,

al sentir el calor de tus entrañas,

al sentirme tan dentro de ti, de ser tan tuyo,

de formar parte de tu propio cuerpo de ser tu.

Es imposible no morir de amor,

 viendo, tu transparente sonrisa, tu clara y seductora mirada,

 tus pechos pujantes, tus carnes morenas,

 tus labios rojos y dulces, como frutas salvajes,  

como salvaje es tu apariencia y tu forma de amar.

Es imposible no morir de amor

 al ver, tu desnude, al acariciar tu cuerpo escultural y ardiente como mi propio fuego,

Al recorrer con mi lengua tu vientre,

 me siento desvanecer,  sin fuerzas, sin voluntad,

 solo una parte de mi se mantiene fuerte y erecta,  como el mástil de una bandera,

 como el timón de un velero, de tu velero,

 ¿Sabes que eres mi océano?

océano donde navego, impregnado del  jugos de  tu fuente de la vida y del amor.

¿Sabes?  Que soy esclavo  de tus besos y tus caricias,

¿sabes? que ya,  sin ti,  no podría seguir viviendo,

que necesito el alimento de sentirte y tenerte junto a mí

 que necesito el tacto de tu piel y el sabor de tus labios,

que si no te tengo, me falta el aire

 que no puedo respirar, que me asfixio,

que no me funciona nada sin ti,

¿lo sabías mi amor? 

Pues no me faltes nunca jamas.

Autor Joaquín Méndez.

Reservados todos los derechos.

07/09/11.