Paciencia

      Las oficinas del cielo se han abierto para el público, la línea es inmensa…  uno pensaría que la vida es simple y feliz ahí. Pero son tantas almas  con asuntos  “pendientes”…La fila la encabeza un alma jovencita…

 

 

       -Gracias, por recibirme, verá usted mi buen ángel, Yo NO debería estar aquí, ¿me explico? algo salió mal, ¡Yo debería estar viva!- El ángel sonríe y dulcemente le responde: Mi quería Alma, lo que tú quieres es reencarnar y  para eso debes presentar una aviso R-I (retorno  inmediato), lee cuidadosamente, ya que debes llenar todos los requisitos y presentarlo en la ventanilla de "Casos Extraordinarios”,  sobre todo ¡se paciente!.

¿Paciente? ¡Qué ángel tan raro! Si este aviso solo dice motivo y razón, para reencarnar.

Motivo: algo que tengo que hacer.

Razón: urgente,

 ¡Listo!

  

      Tomo cinco años, para que le dieran cita, en la tierra era el año 1970…

 

 

 

 

 

        -Mi buen ángel, he sido muy paciente le entrego el formato RI, ¿qué vuelo debo de tomar?- ¿Tomar? El formato no está correcto, debes de ser especifica lo siento, lo tengo que rechazar! vuelve a llenarlo. Asshhh! lo malo es que aquí no se puede maldecir… eso va contra las reglas, estoy perdida, no recuerdo ¿porque tengo que regresar? ¡Solo sé que debo regresar!...Motivo: Tenia 15 años, ahora recuerdo… la bohemia, yo tenía una cita!

Disculpe mi buen ángel ya tengo el motivo, ¿y la razón? (urgente pensé), ¡paciencia!, toma un nuevo turno…me lleva!! ¿Perdón?.  Nada mi buen ángel seré ¡paciente!

Han pasado 8 años, ahora todo es tan claro –Yo tenía una cita, comenzaba a conocer el amor, se suponía que nos volveríamos a encontrar, pero ahí mi luz se apago.

El siguiente… Mi buen ángel el motivo y la razón son las mismas es el AMOR,  ¡Muy bien caso aceptado!,  pase a la sala para que le asignen su nacimiento, ¿Nacimiento? no, no, no, usted NO  me comprende, debería tener alrededor de 25 años he perdido la cuenta, ¡hablare con San Pedro! Salí con la cara desencajada, pensaba en voz alta (cómo me volvería a encontrar con ese amor, si ya era complicado coincidir, ahora volver a empezar y si no me agrada la época y si no es lo que espero y si censuraron la música?) a lo lejos escuche una voz;  ¿buen día, asustada?... Mi nombre es François-Marie Arouet^*, llevo aquí doscientos años, así que tengo un cumulo de experiencia, pero solo te diré mi querida Alma, no tengas miedo, el amor está lleno de coincidencias,

 “Los buenos espíritus se rencuentran”.