No se encuentran en el mercado negro
ni en el salmón de los periódicos
ni en los selectos círculos de Wall Street
pero yo te aseguro que es verdad
que el kilo de gemidos cotiza al alza
por encima del yen y el dólar.
Por eso colecciono tus suspiros
tus jadeos, susurros y gemidos
guardados tras el blindaje de mi memoria.
Y cuando quiero, los extraigo
los recuerdo, los acaricio
como un avaro recuenta sus monedas:
en soledad, con los ojos brillantes de codicia
tras la puerta cerrada del recuerdo.
Y dejo volar tus gemidos, tus gritos, tus jadeos
y tú vuelves a estar aquí, a mi lado
radiante, libre, cercana, eterna
entrando a raudales por mis oídos.
Yo beso tu voz sin palabras
que ilumina las tinieblas de mi alma.
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Autor:
Hombre Sin Pulso (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 3 de agosto de 2011 a las 05:22
- Comentario del autor sobre el poema: Los suspiros son recuerdos audibles, encerrados en el cofre de la memoria como un tesoro.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 155
Offline)
Comentarios3
Hermoso poema que se roba suspiro del alma.
Me gustó pasar por tus letras. Saludos, Lev =)
BELLAMENTE LOGRADO TU SENTIR , TE ABRAZA, STELLA
Apenas estoy empezando a leerte y me encantó, dime en donde se consiguen esos cofres o frasquitos, lo que sirva para guardar esos gemidos, esos momentos, no quiero que se los lleve el viento...
Un abrazo...
Yo los guardo en la última neurona del hemisferio derecho, siguiendo camino al cerebelo. Je, je..., Gracias por tu comentario.
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