LA CARTA

En medio de la multitud el hombre dejo caer una hoja de papel, otro la tomo, no era para el, muchos la tomaron y la dejaron caer sobre el frio cemento sin leerla. Al cabo de la noche cuando el mundo dormia, alguien la buscaba con lupa en mano y una cerilla de fosforos quemandole sus dedos.

Al cabo de horas de busqueda desesperada la encontro y sin preambulo de tiempo la guardo en su saco roto. Recostado sobre el umbral de la luna tomo su lupa vieja y empezo a leerla con voz apacible pero entrecortada: aqui mi adorado Checovick, te escribo esta carta para decirte que el tiempo no ha enmudecido mi amor por ti despues de haber pasado el invierno y el verano, todavia siento el calor de tus labios en los mios y el peso de tu cuerpo sobre mi vientre aplastando mi respiracion. Te sigo soñando y deseando hasta sentir mi cuerpo mojado y el cosquilleo de tus besos sobre mi cuello llevandomen a lugares desconocidos en mi mente, sigo aqui esperandote con la ventana abierta de mi alma y con la alcoba llena de fragancia y el olorde nuestros sexos.

Aqui donde el mar se queda con las olas y los vientos vuelan despacio, yo te estoy esperando vida mia, no hagas palidecer la tarde con tu espera, deme el aliento para esperarte hasta que el sol se oculte en los potreros, y la luna cubra los espacios del azul cielo.

Estoy mirando la foto donde la nieve cubria la desnudes de nuestros cuerpos y donde vimos las caricias del amor flotar en el espacio por eternas noches.

Estoy recordando este lugar por donde por primera vez tu entrastes en mi cuerpo y me volcastes en la mas grande pasion jamas imaginada por mortal alguno.

Olvides olvidarme porque el olvido sera mayor que el olvido y el sentimiento de culpa te llevara en las noches a pensar que dejastes ir parte de tu vida porque soy tu cordon umbilical; recuerdas que los recuerdos viven en la medida en que abramos los puentes entre el amor y la esperanza, entre los sentimientos emocionales y la razon del corazon.

Te sigo esperando en el mismo lugar donde todas la noches tu abrazastes los sueños con los mios en uno solo, donde reistes y llorastes porque no lograbas en el tiempo decirme que me amabas, donde solamente con tu mundo imaginario de caricias me hicistes sentir de este mundo y de otros, donde en cada fuego de tus besos dejo mi boca perfumeda con la dulce fragancia del amor y la pasion.

Escucho el tren en la distancia acercarse a la estacion, en el vagon numero trece yo te espero con el baul lleno de sorpresas, las abriremos cuando hayamos decendido al valle donde los dos crecimos en medio de arbustos y ganados, donde los dos jugabamos a perdernos para luego asustarnos con nuestras risas.

¿ Lo recuerdas?

Te dejo mis labios pintados para que pongas los tuyos sobre los mios, te dejo mi corazon abierto para que entres en el mio, te dejo esta carta para decirte que te amo.

El hombre con lagrimas en sus ojos salio corriendo pero al llegar a la estacion el tren habia partido hacia lejanas tierras.